El hombre que, por motivos que aún se desconocen, encendió todas las alarmas en Washington al dispararse a sí mismo frente a la Casa Blanca ha sido finalmente declarado muerto, según informaron fuentes oficiales.

"El sujeto está muerto. El sujeto se acercó a las proximidades de la zona norte de la valla de la Casa Blanca, sacó una pistola que llevaba escondida y disparó en varias ocasiones, sin que aparentemente llegara a apuntar contra la Casa Blanca", explicó el Servicio Secreto a través de un comunicado.

La identidad del hombre se conoce pero aún no ha sido revelada por las autoridades, se disparó frente a la residencia presidencial, lo que obligó a llamar a los servicios de emergencia y a cortar el tráfico en algunas calles cercanas.

Según informó inicialmente el Servicio Secreto, que es el cuerpo encargado de proteger al presidente y a su familia, el sospechoso no falleció en el acto, por lo que fue traslado urgentemente a un hospital cercano.

Por el momento se desconocen los motivos que impulsaron a esta persona a atentar contra su vida en tan emblemático lugar, aunque la policía metropolitana de Washington está investigando lo ocurrido.

Tanto el presidente Donald Trump como su esposa, Melania, se encontraban en el momento de los hechos en Palm Beach (Florida), donde el matrimonio cuenta con una mansión reconvertida en club social a la que califican como su "Casa Blanca de invierno".