Jesús Cepeda, coordinador de Soluciones Globales de Repsol, trabaja desde casa dos días a la semana. "Me permite conciliación familiar y no perder el tiempo en atascos", cuenta. Tiene un cargo intermedio y está convencido de la efectividad de la flexibilidad laboral.

"Como coordinador de jefes yo soy el primero que tiene teletrabajo, por lo que damos ejemplo de que realmente es algo que funciona", señala Jesús Cepeda.

Jornada intensiva, teletrabajo o autogestión del horario. Con prácticas como esta, las empresas podrían evitar "el presentismo, que es dedicar tiempo de trabajo a tareas personales", tal y como explica Javier Blasco, director jurídico de Adecco.

Un estudio publicado por Adecco revela que más de un 46% de las compañías españolas se ve afectada por esta práctica. El uso de las redes sociales, incumplir el horario o las pausas alargadas para el café son las más frecuentes.

En este sentido, el director jurídico de Adecco explica que "muchas de estas prácticas de presentismo tienen que ver con la desmotivación del trabajador"

No por estar más tiempo en la oficina se es más productivo. El Gobierno ya se planea tomar medidas. "Estamos estudiando el establecimiento de un registro horario y el reconocimiento de trabajadores a la distribución regular o previsible de su jornada laboral", afirmó la ministra de Trabajo, Migraciones y Seguridad Social, Magdalena Valerio.

Son muchos los estudios que avalan los beneficios de acabar con el clásico "calentar la silla en el trabajo". Las empresas que ya lo implantan notan un impacto positivo.

Pilar Rojas, responsable de Cultura Coorporativa en Repsol, apunta que "cuando las compañías se centran en el talento de los colaboradores y en sus contribuciones personales más que en la presencia física y en el control, eso hace que el talento se desarrolle en su máxima potencia".

E incluso Pilar Rojas va más allá: "El grupo de empleados que trabaja desde su domicilio aumenta su rendimiento con el tiempo".

Según las previsiones, en 2030 entre el 8% y el 13% de los puestos de trabajo en economías desarrolladas se asociará a espacios de trabajo flexibles.