España es un país de cerveza, pero cada vez más sin alcohol. Se nota en los bares, donde se escucha pedir más cerveza sin alcohol, y también lo confirman las cifras. Las ventas de la 'sin' ascendieron un 11 % el año pasado, según datos de Cerveceros de España. Como resultado, casi el 13% de la cerveza que consumimos en España es sin alcohol, según datos del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. "Somos líderes en el mundo en consumo y producción", destaca Jacobo Olalla, director general de Cerveceros de España.

El impulso en el crecimiento se produjo, sobre todo, por el mayor consumo en bares y restaurantes. Olalla añade que la cerveza sin alcohol "es una alternativa que se consume cuando alguien quiere disfrutar y no quiere renunciar al placer de tomarse una cerveza, pero no puede o no debe tomar alcohol". De hecho, cerca del 40% de las ocasiones de consumo de cerveza sin alcohol se asocia con la conducción.

La salud también es un factor que tienen en cuenta quienes consumen alcohol. Hay quienes buscan evitar la resaca, un estilo de vida más saludable o apuestan por la 'sin' cuando están enfermos. Sobre el perfil del consumidor de la cerveza sin alcohol, Samuel Garrido, gerente del restaurante Tintapea, afirma que "suele ser gente que ha consumido toda su vida cerveza y ahora, por recomendación médica o por concienciación, ha decidido seguir tomando cerveza, pero sin alcohol".

Además, también ayuda la mayor variedad que ahora hay en la cerveza sin alcohol y por gustos destaca la preferencia por la tostada. Jacobo Olalla también afirma que los españoles cuando consumimos cerveza "no buscamos consumir una bebida alcohólica, buscamos su amargor y refrescor, que acompañe al aperitivo".