Según cifras del Banco de España, el porcentaje que las familias guardan de su renta disponible se situó en el 4,85%. Este ahorro financiero de las familias fue de 2,15 billones de euros a finales de 2018, un 1,6% menos que el año anterior.

En una nota remitida por la Asociación de Instituciones de Inversión Colectiva y Fondos de Pensiones (Inverco) se explica que la adquisición neta de activos financieros (compras menos ventas) por parte de los hogares fue ligeramente superior a la del año anterior (22.426 millones de euros), en torno al 1,8% del PIB.

No obstante, este aumento de la inversión neta en activos financieros estuvo acompañado de un notable ajuste de valor de la cartera de las familias por efecto mercado, en especial la de renta variable, que se tradujo en una corrección del precio de la mayoría de los activos.

El efecto conjunto fue una reducción en el saldo total de activos financieros de 34.343 millones de euros, un 1,6% menos que a finales de 2017.

A pesar de la elevada volatilidad presente en los mercados financieros, las instituciones de inversión colectiva han mantenido su condición de activo financiero de referencia de los hogares españoles, liderando el ranking de adquisiciones netas, con unas suscripciones de 9.749 millones de euros, solo superadas por los flujos netos positivos experimentados por los depósitos a la vista, en un entorno de elevada incertidumbre.