No ingresamos en neto todo lo que cobramos, y que cada vez ganemos más no quiere decir que esto nos esté permitiendo comprar también más cosas. La inflación sube más que los salarios y eso ni es nuevo ni tampoco una singularidad. El último salario medio bruto calculado por el INE es de unos 2.097 euros brutos si lo dividimos en 12 pagas, pero el Adecco Group Institute traza lo que hasta el final del año pasado sería nuestro salario neto, unos 1.823 euros. Es la cifra más alta de la historia, ha subido un 4,1% en un año e incluso lleva seis trimestres consecutivos al alza. Pero lo cierto es que como los precios crecen con más fuerza, nuestro poder adquisitivo baja: el bolsillo ha perdido unos 157 euros en el mismo periodo. Pero es más: Adecco calcula que hoy podemos comprar menos, en cantidad y calidad, que en 1996.

Desde febrero de 1996 los precios han crecido un 86,4% según los cálculos del INE, prácticamente se ha doblado. Sin embargo nuestro salario bruto en 12 pagas ha subido menos, un 52% de lo que percibíamos en aquella época, que traducido a la moneda actual ascendía a 1.376 euros. La compra y la energía son más caras, pero también lo es el ocio y la compra de vivienda y coche. El mejor momento de poder de compra, según Adecco, fue el año 2009, cuando los efectos de la gran recesión aún no se habían agudizado, pero desde entonces también han subido muchos precios.

Si nos comparamos con 2013, hace justo una década, pagamos un 20% más por un coche nuevo (22.000 euros según la Agencia Tributaria), y también más por la vivienda. Es cierto que aquí no se han alcanzado los máximos del año 2008, salvo en Baleares, pero hay que tener en cuenta que hablamos de una burbuja. Según las tasaciones que recoge el Ministerio de Agenda Urbana, ahora el metro cuadrado en España cuesta 1.729,2 euros, que es más que en hace 10 años cuando costaba 1.531,2 euros, y casi el triple que en 1996 cuando su valor era de 694,4 euros.

Peor que en pandemia

Durante el año 2020 la economía española se desplomó, casi 4 millones de trabajadores se vieron afectados por un ERTE -muchos de ellos percibiendo el 75% de su salario base sin que la empresa se lo complementase- y los autónomos se vieron compensados parcialmente por una prestación por cese extraordinario. Muy pocos pueden contar que sus ingresos realmente subieran. El poder de compra también se desplomó pero, incluso con la economía congelada, la cifra era más elevada que la actual. Javier Blasco, director del Adecco Group Institute, explica que se está perdiendo un 0,7% de poder de compra, "es el quinto trimestre consecutivo a la baja", y confirma que la situación actual está lejos de la mejor, la de 2009, "un 10.1% más bajo que el mayor poder adquisitivo".

Hemos retrocedido en poder adquisitivo, como todos ya sabíamos, pero el estudio de Adecco nos ha señalado hasta cuándo, nuestra casilla de salida está 27 años atrás. Durante todos estos años el bolsillo se ha sobrepuesto al redondeo, a la crisis inmobiliaria, y a la de la pandemia, pero el supermercado y la energía lo ha noqueado, de momento.

España no pierde por igual

A pesar de esos 157 euros que ha perdido el poder de compra del salario medio en el último año, no ha sido una caída homogénea en todo el territorio. Canarias, Baleares, y en menor medida Cataluña, pueden contar que su poder adquisitivo ha crecido considerablemente. El contraste lo dan las 13 Comunidades Autónomas que están en negativo (todas las demás salvo la Comunidad Valenciana). Navarra está a la cabeza de los que más poder adquisitivo pierden, seguido de Asturias y Castilla-La Mancha.