Ya sabíamos que la cuota hipotecaria es más barata que la del alquiler en las grandes ciudades y en zonas muy turísticas, pero ahora también pasa de media en todo el país. De hecho tan solo hay tres capitales de provincia donde sale más a cuenta alquilar: Granada, Palma de Mallorca y San Sebastián.

Ya sea porque la vivienda en propiedad es muy asequible, como en Ciudad Real o Lleida, o porque los alquileres se han disparado por la falta de oferta, como en las zonas más tensionadas, la compraventa sale a cuenta. Huelva encabeza este ranking, según Idealista. En la capital onubense costaría un 81 % más alquilar que pagar la cuota de esa misma vivienda de dos dormitorios.

El ranking lo continúan Lleida, Jaén, Murcia y Valencia, donde por cada 100 euros que se deja el hipotecado valenciano, el alquilado se deja 56 euros más. En el extremo contrario está San Sebastián, donde la propiedad es tan cara que incluso el alquiler, que ya es alto, compensa. Ser arrendatario significa pagar un 12% menos que un hipotecado. Un caso similar, también por la misma causa, es el de Palma, donde alquilar es un 10% más barato que pagar la hipoteca.

Pero aunque los datos sean incontestables a favor de la compraventa, no es tan fácil decantarse por ella. La oferta es escasa, la vivienda nueva es considerablemente más cara debido a la subida de precio de los materiales, las condiciones de financiación se han endurecido y encarecido, y además el pago de la entrada, los gastos y los impuestos, son una muralla para muchos potenciales compradores.

Según Idealista, el ahorro medio necesario es de 43.467 euros, una cantidad que se dobla si hablamos de Barcelona o Madrid. Todos estos factores también son los que están frenando la firma de hipotecas, que ha caído por octavo mes consecutivo en su serie interanual, según los datos más recientes del Instituto Nacional de Estadística.

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