El tenista español Rafa Nadal se ha impuesto con contundencia (6-1, 6-2, 6-2) a su compatriota Roberto Bautista para acceder a cuartos de final de Roland Garros, segundo 'Grand Slam' de la temporada, en un partido disputado en la pista central del torneo parisino este domingo y en el que ha demostrado su superioridad y el buen estado de forma que ha traído a la cita.
El exnúmero 1 del mundo dominó el partido de principio a fin ante un Bautista que acusó el buen estado de forma de su rival, que no ha cedido ningún set en lo que va de torneo. Desde la primera batalla, Nadal no dio opciones y se fue haciendo con el control del encuentro para terminar liquidándolo en menos de dos horas. Sobre todo merced a los buenos porcentajes de puntos ganados y a los 25 errores no forzados que cometió el castellonense.
Solo una vez antes se habían enfrentado los dos españoles, en las semifinales del Mutua Madrid Open del año 2014, que acabaría ganando el propio Nadal. En aquella cita, Bautista no pudo competir contra el tenista balear, al igual que tampoco pudo hacerlo este domingo en Roland Garros. El manacorí avanzó, imparable, hacia el objetivo de lograr el décimo Roland Garros de su trayectoria deportiva para convertirse en un mito y lograr algo que nunca nadie ha conseguido.
Nadal comenzó el partido de manera fulgurante, con una rotura en el primer saque del castellonense. Sin embargo, su adversario consiguió contrarrestar ese golpe inicial del manacorí con un 'contrabreak' que le dio la oportunidad de empatar la contienda con su saque, el cual volvió a perder en unos primeros compases de partido con muchos fallos en los servicios de ambos tenistas.
El segundo 'break' sí consiguió consolidarlo Nadal, no sin problemas ante un Bautista que, pese al esfuerzo, cometió errores en momentos puntuales que le hacían terminar perdiendo los juegos. Con otra rotura más al servicio del de Benlloch, el nueve veces campeón del torneo parisino se puso con bola para ganar el primer set en solo 41 minutos de juego.
Nadal siguió demostrando fortaleza con su saque y, en el tercer juego de la segunda tanda, logró volver a romper el de Roberto Bautista. Algo que repitió en el siguiente saque de su rival, que no se encontraba cómodo, cometiendo muchos errores no forzados que le fueron lastrando. Todo parecía encaminarse a una victoria fácil para Nadal, que tuvo unos porcentajes de acierto casi inmaculados, 93% en el primer servicio y un 100% en el segundo.
La tercera etapa del partido se mostró más igualada que las dos anteriores. Bautista llegó a tener la oportunidad de una rotura al saque de Nadal, algo de lo que no había disfrutado en todo el segundo set, pero no logró culminarla. Ello supuso un punto de inflexión en el quinto juego, en el que terminó perdiendo, nuevamente, su saque dando ventaja al manacorí.
Desde ese momento, el partido se puso cuesta arriba para el castellonense, que se desdibujó tras haber empezado más fuerte. Una nueva rotura y un set inmaculado dieron la victoria final a un Rafa que sigue su camino inalterable hacia la final de Roland Garros, en la que espera lograr su décimo título sobre la tierra batida parisina. El siguiente en su camino saldrá del partido que enfrentará al canadiense Milos Raonic y al español Pablo Carreño.