Tanto sufrió Aston Martin en el Gran Premio de Miami que el noveno puesto de Fernando Alonso supo a gloria. En la previa el asturiano ya avisó de que era un circuito difícil para ellos. Y se confirmó. Del decimoquinto puesto en la salida a un noveno muy digno.

Pero Fernando, claro, no se conforma. Ha mandado un mensaje muy exigente hacia Aston Martin y también para sí mismo: "Tenemos que mejorar, no he hecho un fin de semana redondo por mi parte. En las dos clasificaciones no he conseguido sacar una vuelta buena y eso ha comprometido las salidas y la carrera...".

"Y luego, como equipo no hemos conseguido el 'set-up' adecuado, no estaba en esa ventana en la que opera en perfectas condiciones. Si hubiésemos tenido un entrenamiento más habríamos hecho algún cambio y tendríamos más ideas", apuntó el recién renovado piloto de Aston Martin después de la carrera.

Sus luchas fueron en muchos momentos contra Esteban Ocon, al que finalmente dejó atrás: "Fue una carrera extraña, luchábamos con Russell pero también con Alpine. O íbamos tan rápidos como los Mercedes, o tan lentos como los Alpine, o tenían mucho ritmo aquí".

"Es un fin de semana difícil y lo mejor son los dos puntos del domingo. Quizás más de lo que esperaba conseguir. Tuvimos suerte con el coche de seguridad, a veces beneficia y otras perjudica...", aseguró Alonso.

Aston Martin volvió a ser quinto equipo. Por detrás de Mercedes y muy lejos del rendimiento que han mostrado este fin de semana los McLaren, que derrotaron a Max Verstappen de la mano de Lando Norris. Todos mejoran... y el equipo de Lawrence Stroll debe espabilar.