Más de 20 operaciones por un terrible accidente en Fórmula 2 en el año 2019. Pero a Juan Manuel Correa nada le tumba. Sigue con su sueño intacto: ser piloto de F1. Y quiere lograrlo en 2023.

En 'Jugones' hemos conocido su historia, donde ha contado cómo lo pasó después del accidente: "No podía respirar y al cuarto día tuve un parón respiratorio y tuve que entrar en un coma inducido. Me dijeron que había un alto riesgo de que muriera en la operación porque mis pulmones estaban muy débiles".

Él no le recomendaría a nadie pasar por todo lo que ha vivido: "Si mi hermano tuviera lo mismo el día de mañana le diría que se cortara la pierna. No vale la pena hacer el tratamiento que yo hice. Había días que me quería morir. Tener dolor 24 horas al día es miserable. Y así pasé casi cinco meses de mi vida".

"Mi vida colgó de un hilo durante tres semanas", expresa Correa, que cuenta cómo ha sido la recuperación: "Tuve que recrecer 10 centímetros. Cortarme la tibia aquí y esta parte se va regenerando".

Afirma que lo ocurrido no es un milagro: "Es esfuerzo". Y apunta a su objetivo, que sigue siendo el mismo de antes del accidente: "Mi sueño sigue intacto, correr en Fórmula 1 en 2023".