Las últimas vueltas del Gran Premio de Singapur han sido las más tensas, igualadas e interesantes de toda la temporada. La lucha por la victoria estuvo abierta entre cuatro pilotos hasta la última vuelta y, si bien es cierto que finalmente se la llevó Carlos Sainz, el desenlace podría haber sido bien distinto.

Con una estrategia diferente, los hombres de Mercedes, con un neumático más blando, eran los pilotos más rápidos en pista y, por eso mismo, era cuestión de tiempo que adelantaran tanto a Carlos como a Lando Norris.

No obstante, la genialidad estratégica del piloto madrileño dándole el DRS a Norris en las últimas vueltas permitió a ambos acabar en las primeras posiciones y, en consecuencia, dejó a los Mercedes fuera de la pelea.

Aun así, pese al tren de DRS que formó Sainz y que dificultaba las cosas para George Russell y para Lewis Hamilton, Russell quiso arriesgar curva tras curva para ganar la carrera. Algo que, definitivamente le salió muy caro y por lo que acabó contra el muro.

Tal y como ha confesado el piloto británico a través de unas declaraciones recogidas por 'Sky Sports' tras la carrera, era "difícil mantener la concentración": "Ha sido una carrera muy larga y física".

"Creo que estábamos a medio coche de ganar la carrera si hubiera pasado a Lando cuando tuve la oportunidad... pienso que habríamos podido pasar a Carlos. Luego, en la última vuelta, tuve un lapso milimétrico de concentración y el juego terminó. Lo siento mucho por todo nuestro equipo", asegura el joven británico.

Asimismo, George reconoce también que así son las carreras: "Estábamos superando los límites. Así es como deberían ser las carreras: cometes un pequeño error y te 'muerden', pero es desgarrador después de un fin de semana tan fantástico, es duro".

'Caso Brody'

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