Ferrari ha llegado para quedarse. Charles Leclerc fue el ganador de la primera carrera de la temporada en Bahrein. Y quiere más, consciente de que con ese monoplaza puede ser campeón del mundo.

El Monegasco, líder del mundial, quiere otra victoria después de una lucha como la que mantuvo contra el Red Bull de Max Verstapen: "Es un tipo de carreras que me gustan, disfruto".

"Es una carrera dura, como hemos visto con Max en el pasado. Pero también soy un conductor agresivo cuando lucho con los demás. Disfruto de carreras duras como esta, pero carreras justas. Así que no creo que hubiera nada malo en todos esos adelantamientos", dice.

Además, ha detallado cómo fue su defensa cobre el campeón: "Lo esperaba y en realidad lo quería, porque sabía que si no me adelantaba allí me adelantaría en la recta hacia la curva 4 con el DRS. Así que frené muy temprano en la curva 1 a propósito para estar justo detrás en la detección de DRS y adelantarlo de nuevo en la curva 4".

"En el reinicio, sabía que Max está haciendo con bastante frecuencia lo de estar lo más cerca posible y, a veces, al lado del piloto que lidera", indica Leclerc.

Este fin de semana, en Arabia Saudí, se espera que Ferrari y Red Bull vuelvan a luchar por la victoria. Aunque se desconoce si los de las bebidas energéticas han logrado poner fin a sus problemas de fiabilidad.