Un aficionado de la Real Sociedad, de iniciales, I.G., perdió un dedo en el Olímpico de Roma en el partido de Europa League que enfrentó a los 'txuri urdin' contra el equipo de Jose Mourinho. El hombre, de 50 años, se resbaló y el apéndice le quedó atrapado en una de las vallas.

Fue antes del partido, cuando al ver a unos chavales subidos a un muro él hizo lo mismo. La amputación del dedo, el anular de su mano derecha, fue limpia.

Posteriormente, otro aficionado pudo localizar el miembro y se lo entregó a su mujer. La alianza, eso sí, la perdió.

El problema vino con el tema lingüístico, porque no entendía nada de lo que le decían y casi pierde el conocimiento.

Se le trasladó al Policlínico Gemelli, donde se le sometió a una cirugía de cuatro horas y se le pudo implantar de nuevo el anular amputado.

Jokin Aperribay, presidente de la Real Sociedad, ha visitado al aficionado junto al médico del primer equipo, Javier Barreda, y le ofreció volver en la expedición oficial de la directiva y de los patrocinadores. Una vez en San Sebastián, se le trasladó al Hospital Donostia.

A pesar de lo sucedido, el aficionado no perdió el sentido del humor, y además se llevó la camiseta con la que Kubo jugó en Roma.