Maracaná fue la sede para el primer partido del Flamengo después del incendio. El mítico estadio fue testigo de un emocionante homenaje a las jóvenes víctimas del incendio que ocurrió en la ciudad deportiva del Flamengo.

En el estadio estuvo Emanuel, uno de los supervivientes de la tragedia, el cual estuvo ingresado en un hospital hasta hace pocos días y obviamente no pudo aguantar las lágrimas.

Se jugó el partido aplazado por el incendio. Hasta 30.000 aficionados rindieron homenaje a los fallecidos. La afición cantaba: "Esta nación no os olvidará jamás, el Flamengo va a jugar para siempre por vosotros". El minuto de silencio enmudeció Maracaná. Los globos, pancartas y cánticos fueron los protagonistas en una noche muy dura para el fútbol brasileño.

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