Morata fue el héroe de la noche para el Chelsea al marcar un gol decisivo ante el Bournemouth: fue el tanto de la victoria y el equipo 'blue' avanzó a semifinales de la Carabao Cup. En su celebración, Morata hizo lo que muchos otros jugadores hacen: simuló una barriga embarazada con el balón para dedicárselo a su mujer.

Los dos esperan un hijo, por eso la celebración. El árbitro no lo entendió así y le mostró la tarjeta amarilla por "celebración efusiva" y ahora, por acumulación de cartulinas, Morata se tendrá que perder el próximo partido de la Premier League contra el Everton.

Antonio Conte habló del tema en sala de prensa y se mostró en desacuerdo con la decisión: "Es una gran pérdida para nosotros. Estábamos celebrando en el momento del gol y no me di cuenta de la situación. Me parece una pena, con la celebración demuestras tu alegría. Pero el árbitro lo interpretó de otra manera".