Leganés y Málaga empataron un duelo directo por la permanencia que dominó el conjunto madrileño, que se mostró más incisivo en ataque y tuvo las mejores ocasiones del partido, aunque su portero, Iago Herrerín, salvó a su equipo casi al final con una buena parada a un remate de cabeza de Camacho.
Con el mismo objetivo, dar un paso hacía la permanencia, Leganés y Málaga se enfrentaron en Butarque bajo un sol radiante y una temperatura muy agradable que invitaba a una mañana de fútbol. El equipo que más cerca estuvo de abrir el marcador fue el conjunto madrileño a los 17 minutos.
El Leganés buscó más el triunfo que el Málaga
Szymanowski botó una falta desde la derecha, Bustinza remató en el segundo palo con la zurda y en el área pequeña, con un delantero azulón preparado para empujar el balón, Charles despejó en línea de gol. A partir de esa acción, la primera parte tuvo dos fases bien diferenciadas, con unos quince minutos de dominio para cada equipo.
El Málaga fue poco a poco ganando terreno en el campo del Leganés y, aunque no tuvo una ocasión clara, sí creó peligro, sobre todo por el costado izquierdo que comandaron Juan Carlos y Chory Castro, siempre buscando a Charles y a Sandro. El Leganés se repuso de la sensación de dominio del Málaga y, pasado el minuto 30, gozó de sus mejores momentos que culminaron en dos ocasiones muy claras. La primera de Mantovani, que remató alto un balón que le cayó rechazado al filo del área pequeña, y la segunda con una jugada a medias entre Szymanowski y Diego Rico que Tito, en el segundo palo, no acertó a rematar.
Tras el descanso, el Málaga avisó de sus intenciones con una buena jugada a la contra que terminó con un pase de Charles a la espalda de la defensa blanquiazul y un remate alto a la carrera de Sandro. Esa jugada pilló desprevenido al Leganés, que a partir de entonces se hizo absoluto dominador del choque y poco después pudo marcar con un duro disparo de Diego Rico que despejó Kameni.
El conjunto madrileño lo intentó de todas las maneras posibles y de nuevo Diego Rico, con un disparo al palo, llevó el miedo al conjunto andaluz, que no tuvo fluidez en la circulación del balón ni supo trenzar jugadas de ataque con cierto peligro.
Herrerín salva la mejor del Málaga
La mejor ocasión del Málaga llegó en los minutos finales, en el 83, con un cabezazo picado de su capitán, Ignacio Camacho, que Iago Herrerín despejó a córner con una buena estirada salvando al Leganés. Con el punto sumado, Leganés y Málaga siguen su particular lucha por la permanencia y se mantienen fuera del descenso a una buena distancia de los tres de abajo.
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