Los tentáculos de Vladimir Putin sobrepasan la esfera política y abarca muchos ámbitos de la vida. Una buena prueba de ello es la presión que ejerció para que el Arsenal tuviera que pagar el doble de lo que tenía previsto por Andréi Arshavin, perteneciente al Zenit de San Petersburgo, equipo favorito del mandatario ruso.

Ni los siete millones que ofreció el Arsenal ni la intervención de Arsene Wenger logró que el conjunto eslavo cambiara de opinión. El Zenit rechazó la oferta de los gunners tras la negativa de Putin., así lo desveló Jon Smith. Además, el representante cuenta en su autobiografía que un hombre clave en la operación fue Alisher Usmánov, magnate ruso y dueño del 30% de las acciones del Arsenal, que utilizó sus contactos en Rusia (a espaldas) de los londinenses para cerrar el fichaje.

Arshavin, apoderado de Putin

Otro hecho que explica que Putin se implicara tanto en el traspaso de Arshavin es que el ariete nunca escondió su simpatía por el mandatario ruso y buena prueba de ello es que le apoyó en las elecciones presidenciales.