Brittney Griner, estrella de la WNBA con la franquicia de las Phoenix Mercury y también jugadora del UMMC Ekaterinburg donde comparte vestuario con Alba Torrens, se encuentra detenida en Moscú desde febrero acusada de tráfico de drogas.

Tras un viaje a EEUU, la jugadora aterrizó en el aeropuerto de Shemeretievo, donde fue puesta bajo custodia policial después de que, supuestamente, se encontrase aceite de cannabis en una de sus maletas.

Fue un perro policía el que detectó la sustancia y un vaporizador en el equipaje de la pívot, de 31 años.

"La inspección del equipo de mano que transportaba la ciudadana estadounidense confirmó la presencia de vaporizadores con líquido de un olor específico que era aceite de cannabis, una droga", dijo el Servicio Federal de Aduanas en Rusia.

La noticia, que ha llegado estos días a los medios de comunicación, ha conmocionado a Estados Unidos, pues Griner es una de las grandes jugadoras tanto de la WNBA como de la selección estadounidense.

No en vano, la pívot ha logrado dos oros olímpicos, en 2016 y en 2020, y dos Mundiales, en 2014 y en 2018.

Además, ha resultado ser elegida mejor defensora de la WNBA en dos ocasiones, y en otras dos fue la máxima anotadora.

Por esto, la jugadora se enfrenta a una pena de cárcel de entre cinco a diez años... y tal y como están las cosas EEUU lo tiene complicado para mediar con ella con Rusia.