La carrera de Céline Dion ha sido un viaje extraordinario marcado por logros increíbles y una devoción inquebrantable a la música. Desde su primer concierto a los 12 años hasta la grabación de su primer disco a los 14, la cantante ha cautivado al mundo con su voz y su presencia escénica. Con más de 200 millones de discos vendidos y casi 11 millones de entradas de conciertos adquiridas, su impacto en la industria musical es innegable.
Por eso, cuando hace año y medio la canadiense anunció que tenía que cancelar su gira, saltaron todas las alarmas. "He sido diagnosticada con una enfermedad neurológica muy rara y no he sido capaz de decirlo antes", reveló la artista, causando preocupación entre sus fans y el público en general.
Pasaron dos años hasta que reapareció en los Premios Grammy por sorpresa para reencontrarse con su público. En un momento emotivo, la artista agradeció el apoyo incondicional de sus seguidores y habló abiertamente sobre su estado de salud. Ahora, la artista se sincera en un nuevo documental, 'I am: Céline Dion', sobre su lucha con el síndrome de la persona rígida, una condición que afecta a tan solo una persona por cada millón.
"Me intimida decir mi propio nombre" confesó la canadiense en una entrevista con NBC News. "Cuando no estaba bien, no quería decirlo. Porque ya no soy la persona que solía ser." Lejos de los focos, la artista ha compartido detalles sobre los últimos ensayos antes de tomar la difícil decisión de centrarse por completo en su recuperación. "No tenía control sobre mí misma y quería tenerlo," explicó.
A pesar de los desafíos, Céline Dion confiesa que lo que más echa de menos es a la gente que la ha acompañado durante toda su carrera. "Volveré a los escenarios, incluso si es arrastrándome," declaró con en una entrevista con ABC News.
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