Esta semana, el BOE recoge el decreto por el que la Biblioteca Nacional deberá guardar al menos una copia decada videojuego desarrollado en España. El objetivo es preservar esa parte de nuestro patrimonio cultural que es cada vez más grande, con una facturación que se espera que supere los 1.600 millones de euros este año.

En el vídeo, nos adentramos en la sala en la que se catalogan y custodian esos ejemplares. Eso sí, todavía les faltan muchos que están en un listado que esperan que se vaya haciendo más pequeño con el tiempo. A través de las donaciones, ya han recibido más de 1.000.

Desde la industria, llevan años insistiendo en que se reconozca al videojuego como un producto no solo industrial, sino con valor cultural.

Las reclamaciones del sector del videojuego

Este miércoles, el sector del videojuego español expuso sus principales demandas para el crecimiento de la industria, entre las que destacan un incentivo fiscal a la producción de videojuegos y la obligatoriedad de que las grandes distribuidoras internacionales reinviertan el 5% de la facturación bruta en el país.

Este miércoles se presentó el 'Libro blanco del desarrollo español de videojuegos 2021', la octava edición del anuario que revisa la situación de la industria en el país de la mano de Desarrollo Español de Videojuegos (DEV), y que cuenta con el apoyo de ICEX España Exportación e Inversiones y Games from Spain.

La presidenta de DEV, Valeria Castro, ha recogido las principales reclamaciones del sector de videojuego español, reducidas en esta ocasión a cuatro, para incentivar la economía del mismo. En este sentido ha apuntado la necesidad de establecer un incentivo fiscal a la producción de videojuegos.

Se trata de una medida "largamente demandada en el sector", como se recoge en el Libro Blanco, y que "ha sido apoyada por los grupos parlamentarios en distintas oportunidades legislativas". Con ella, Castro ha defendido su potencial para atraer las grandes producciones internacionales a España y mejorar el atractivo de la industria frente a los inversores privados.

También solicitan la puesta en marcha de un Plan de apoyo a la industria española de desarrollo de videojuegos, en el marco del Plan de Impulso al Sector Audiovisual (Spain Audiovisual Hub), que incluya la creación de una red de incubadoras y aceleradoras gestionadas por profesionales de la industria, ayudas para desarrolladores, ayudas para apoyar la investigación, el desarrollo y la innovación, y un fondo de inversión público-privado.

Con esta segunda medida el sector persigue establecer un camino de acompañamiento a las empresas de videojuego a lo largo de su ciclo de vida.

Asimismo, se reclama fomentar la incorporación laboral de jóvenes profesionales, con especial atención a la mujer, y el diseño de un esquema de reinversión de la multinacionales en el videojuego español.