'Wikinger' es el primer parque eólico marino construido enteramente por una empresa española, aunque está muy lejos de nuestras costas: ocupa 34 kilómetros cuadrados del Mar Báltico, al norte de Alemania.

Este lugar ha sido elegido por ser un mar con poca profundidad. "Estamos en profundidades medias de 40 metros y con poco oleaje", asegura Patricia Salamanca, responsable de la oficina del proyecto 'Wikinger', que además asegura que tiene "una buena calidad de aire".

La diferencia con los parques ubicados en tierra firme "es el tamaño del parque, de la máquina, las condiciones de viento", que hacen que "sea mas eficiente", según apunta Estanislao Rey, director del proyecto.

La altura de los molinos es impactante: 165 metros, lo mismo que la torre de Iberdrola de Bilbao, pero eso es tan solo la altura por encima del agua, por debajo cuentan con 100 metros adicionales. La electricidad que generan los 70 aerogeneradores se envía a la subestación Andalucía y, desde allí, a 350 mil hogares del norte de Alemania.

Su construcción ha costado 1.400 millones de euros, ha generado 2.000 puestos de trabajo europeos, la mayoría de ellos en España, y además, su puesta en marcha permitirá eliminar 600.000 toneladas de CO2. El director del proyecto ha elogiado estos datos: "Nos coloca a la vanguardia de la industria, hemos sido capaces de demostrar que lo podemos hacer".

Iberdrola sumará dos proyectos similares en la misma zona con el objetivo de ser la compañía líder en energía eólica en Alemania