MHEV Y ETIQUETA ECO
Test a fondo Toyota Land Cruiser: el formidable todoterreno se adapta para seguir siendo un líder
Este 4×4 de raza y casi cinco metros sigue siendo un referente por sus capacidades off-road, pero ahora entra sin problemas en el centro de cualquier ciudad.

Publicidad
El Toyota Land Cruiser lleva décadas abriéndose paso por terrenos imposibles y ganándose la lealtad de quienes buscan un coche fiable, robusto y duradero. Ahora, Toyota da un paso más y presenta en España la primera versión electrificada de su todoterreno más icónico.
Este nuevo Land Cruiser Mild Hybrid combina el veterano motor turbodiésel de 2,8 litros con un sistema de 48 V que añade un pequeño motor eléctrico y una batería auxiliar de ion-litio.

Como resultado, el mítico todoterreno goza de una respuesta al acelerador más suave, una frenada más natural y una conducción más refinada sin perder ni un ápice de capacidad. En carretera, el sistema Stop & Start apenas se nota; fuera de ella, el Land Cruiser sigue vadeando ríos de hasta 700 mm como si nada.
La plataforma GA-F se mantiene, reforzando la receta que ha hecho de este modelo una leyenda: estructura resistente, fácil de reparar y lista para todo. El tradicional chasis de largueros y travesaños es ahora un 50% más rígido.

Toyota quiere dejar claro que calidad, fiabilidad y respeto al medio ambiente no son conceptos incompatibles, ni siquiera cuando hablamos de un todoterreno puro.
Estéticamente, la marca japonesa ha elegido una línea de diseño que combina a la perfección tradición y modernidad. Sigue presentando una línea cuadrada y robusta, con unos voladizos reducidos y protecciones en varios de los elementos expuestos de la carrocería, fácilmente sustituibles.

En el interior, tanto el panel de instrumentos, como la pantalla central que opera el sistema de infoentretenimiento, pueden llegar hasta las 12,3 pulgadas dependiendo del acabado.
Otra cosa que nos ha sorprendido, junto a lo espacioso que es su interior capaz de albergar hasta siete ocupantes, es la cantidad de botones físicos que tenemos a nuestra disposición. Algo extremadamente raro de ver hoy en día, pero, por otro lado, muy necesario para ciertas funciones.

El nuevo Land Cruiser sigue siendo un todoterreno ideal para viajar con la familia, gracias a sus siete plazas. De hecho, quizá ahora más que nunca, porque Toyota ha querido que sea aún más cómodo.
Gracias, en parte, a estar mejor aislado; equipar una suspensión que filtra mejor, aunque tiene un tarado firme; y a su nueva dirección eléctrica, que hace que sea más preciso y que tenga un comportamiento en carretera más cercano al de un turismo.

Así funciona su sistema híbrido de 48 V
Este sistema mild hybrid no busca protagonismo, pero trabaja constantemente para mejorar la eficiencia. Integra un motor-generador eléctrico que reemplaza al alternador y aprovecha las deceleraciones para recuperar energía, que almacena en una batería de iones de litio de solo 7,6 kg.
Toda la tecnología está pensada para pasar desapercibida. La batería va montada en un espacio protegido bajo el capó, refrigerada por aire exterior y protegida contra agua y polvo. Un convertidor DC-DC se encarga de gestionar el flujo energético y aportar el par eléctrico justo cuando hace falta, sin que el conductor tenga que pensar en nada.

A eso se suma un tensor de correa de doble brazo, diseñado específicamente para responder a las exigencias del uso todoterreno. El sistema no solo ahorra combustible, también mejora la respuesta en arrancadas, maniobras y aceleraciones fuertes.
Puede parecer una contradicción, pero este 4×4 de casi cinco metros ahora entra sin problemas en el centro de cualquier ciudad. Gracias a la etiqueta ECO de la DGT, el nuevo Land Cruiser Mild Hybrid puede acceder libremente a las Zonas de Bajas Emisiones, incluso en episodios de alta contaminación.

También ofrece ventajas como descuentos en aparcamiento regulado, uso de carriles BUS-VAO y bonificaciones de hasta el 75 % en el impuesto de circulación en ciudades como Madrid o Barcelona. Lo que antes era un coche de campo por definición, ahora se convierte también en una opción viable para el día a día urbano.
Este nuevo Land Cruiser no quiere ser una revolución, sino una evolución sensata. La electrificación llega poco a poco, sin comprometer la identidad del modelo ni su espíritu aventurero. Toyota ha optado por un enfoque realista: reducir emisiones, mejorar la eficiencia y hacer el coche más cómodo, sin romper lo que ya funciona.

Esta versión Mild Hybrid representa una transición lógica hacia un futuro más sostenible. Una forma de seguir explorando los caminos menos transitados, pero ahora con una conciencia más afinada y una mecánica más moderna.
Los precios arrancan en 87.950 € para el acabado VX y desde 97.500 € en el caso del VX-L.
Publicidad