PARTE 1
Celebramos los 75 años de historia de Seat desde la famosa Nave A122
El 9 de mayo de 1950 nacía “Sociedad Española de Automoviles de Turismo” o, lo que es lo mismo, Seat. Una empresa que tenía un claro fin: motorizar España tras la Guerra Civil, con la producción de coches en la zona franca de Barcelona, bajo licencia de Fiat.

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75 años no se cumplen todos los días. Seat es, en parte responsable, de que nuestro país comenzara a moverse sobre cuatro ruedas. Por eso vamos a hacer un repaso a su historia y, para ello, nos hemos venido a un lugar muy especial para la marca.
Isidre López, responsable de Seat Históricos, nos da la bienvenida para disfrutar de esta colección, un espectacular templo del mundo del automóvil. Gran parte de la historia de la marca española está representada por modelos de diferentes épocas.
El 9 de mayo de 1950 nacía “Sociedad Española de Automoviles de Turismo” o, lo que es lo mismo, Seat. Una empresa que tenía un claro fin: motorizar España tras la Guerra Civil, con la producción de coches en la zona franca de Barcelona, bajo licencia de Fiat.

¿Por qué confió Seat en Fiat para motorizar nuestro país? Pues porque el fabricante italiano contaba con una gama de modelos bastante amplia en la época, mientras que, por ejemplo, Volkswagen solo tenía al Escarabajo en su familia.
El primero en llegar fue este Seat 1400, derivado del Fiat 1400. Un vehículo que comenzó a comercializarse en 1953, sobre todo orientado a motorizar a los servicios públicos.
Era una berlina con una gran presencia, que contaba con un motor de 1.400 centímetros cúbicos y cuatro cilindros, con 44 CV. Ofrecía varias carrocerías y una elegancia que llamaba bastante la atención
El Seat 1400 fue la piedra angular para que el fabricante español pudiera desarrollar un coche más asequible. Algo que Fiat ya estaba desarrollando, con el mítico 600. Y fue gracias a ese coche cuando España comenzó a moverse por toda su geografía, a bordo de este peculiar utilitario…
Con tan solo 3,3 metros de largo, millones de familias españolas comenzaron a sentir la libertad de movimiento individual. Vacaciones a la playa o al pueblo, gracias a un pequeño motor trasero de 18 CV, que enviaba la potencia a las ruedas traseras. El Seat 600 no tardó en ser un modelo muy exitoso, lanzándose posteriormente las versiones más potentes y modernas del modelo: D, E y L. Finalizando su producción en 1973.

Saltando después al Seat 850, que ofrecía más espacio a sus ocupantes y también numerosas carrocerías: berlina de 2 puertas, 4 puertas, coupé, Sport, e incluso una versión Spider.
El Seat 1400 pasa el legado al 1500, que llegó con un motor más potente. Era el tope de gama y quizá demasiado para algunas familias españolas. De la necesidad de fabricar un coche que tuviera más espacio que el 600, pero que fuera mucho más económico que el 1500, nació el 124 en los años 60.
Idéntico a su homólogo italiano, el Seat 124 tuvo un desarrollo paralelo en España. Junto a la gama también estaba el 1430, que era un escalón más respecto al 124 convencional, asentándose justo por debajo del 1500. Además, el 124 tuvo versiones deportivas en la gama, entre ellos, el 124 Sport, o las cotizadas FU y FL. El 124 siguió vendiéndose paralelamente junto a su sucesor, el 131. Además, Seat amplió también su gama con el pequeño 133 y, el 132, una berlina lujosa y potente.
En 1972 llega el Seat 127, que se convirtió en el primer modelo de la marca con motor transversal. Fue el sustituto ideal de los modelos más pequeños de la marca y fue, durante mucho años, el más vendido.
Pero si hay uno que guarda un espacio especial en nuestro corazón es este, el Seat Panda. Diseñado por el famoso Giorgetto Giugiaro, este coche era económico, fácil y barato de mantener. Una evolución del mítico Fiat 500 italiano
En 1980 la relación entre Fiat y Seat empezó a torcerse por diferentes motivos, hasta acabar rompiéndose. A partir de ese momento, se comenzarían a gestar modelos como el Fura, Marbella, Terra y el Ronda. Este último fue un coche muy importante para la marca, porque era el primero de esta nueva etapa, estrenando, incluso, el nuevo logo, o la característica de utilizar nombres de ciudades para designar sus modelos. Los problemas con Fiat resurgirían, ya que pusieron una querella a Seat, acusándole de plagio al Ritmo.

En el juicio, celebrado en Francia, Seat se presentó con este Ronda tan especial, para defenderse de esas acusaciones. Las partes pintadas en amarillo mostraban las propias de este nuevo modelo y, en negro, las que pertenecían al Ritmo. El juez dio la razón al fabricante español, alegando que no existía plagio alguno.
El fabricante español se divorció oficialmente de Fiat en 1982, momento en el que inició su propio camino de forma independiente. O ponía toda la carne en el asador o su futuro podía estar en peligro. Por suerte, reunió a varias de las mejores mentes del mundo del automóvil y lanzó un nuevo coche. Pero no un coche sin más, sino el modelo que, literalmente, salvó a la marca: el Ibiza. El primer coche 100% Seat.
Fue diseñado por Giorgetto Giugiaro, carrozado por Karmann y con motores bajo el capó firmados por Porsche, naciendo el famoso “System Porsche”. Presentó una estética revolucionaria, mucha versatilidad y un soplo de aire fresco a la industria. El éxito fue inmediato, presentándose con carrocería de tres y cinco puertas.
Tras el exitazo del Ibiza, la marca se sentía con confianza y lanzó su segundo modelo, el Málaga. Una berlina que heredó la misma tecnología de su hermano pequeño y que tuvo una gran carrera comercial en nuestro país. Todo iba sobre ruedas pero, en 1986, se produjo un giro de los acontecimientos: la compra de Seat por parte de Volkswagen. Así comenzaba una nueva era para el fabricante español. Una nueva era que seguiremos contándote la semana que viene…
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