La bola de remolque, el accesorio más polémico: ¿sabes cómo instalarla y cómo te afectará en tu próxima ITV?

Cuando el maletero de un vehículo no es suficiente, llega el momento de buscar soluciones para ampliar esa capacidad de almacenamiento o, simplemente, para transportar aquello que, por unas razones u otras, no puede ir en él. Una de las fórmulas pasa por instalar uno de los complementos más polémicos: la bola de remolque. ¿Sabes qué pasos seguir y cómo te afectará en tu próxima ITV?

¿Tu coche puede llevar bola de remolque? Para saberlo hay que consultar la ficha técnica y buscar la Masa Máxima Remolcable sin frenos y con frenos (MMR S/F y C/F) para saber cuál es el peso máximo (remolque incluido) que puedes arrastrar con tu coche. Si el dato no aparece, no puede llevar remolque… y no vale saltarse esta condición porque la seguridad del vehículo está en juego.

Si tienes luz verde para instalar la bola de remolque, pasamos al siguiente punto: los tipos que hay. Básicamente, son dos: fija (es la más aconsejable para un uso intensivo) y extraíble (es recomendable para un uso esporádico porque se puede quitar sin herramientas y puede ser horizontal o vertical). A la bola hay que sumar una conexión con un enchufe de siete (remolques sencillos) o trece pines (caravanas) para que el remolque tenga las mismas luces que tu coche.

Primer paso: el taller

Como ves, instalar una bola de remolque no es algo que puedes hacer en casa: hay que hacerlo en un taller por el proceso que implica (lo normal es que haya que quitar el paragolpes y colocar la bola en una estructura) y porque hay que homologar su instalación, ya que, como decíamos, antes afecta a la seguridad del vehículo. A esto hay que añadir que no podrás colocar cualquier bola porque cada modelo tiene su propia especificación técnica. El precio de esta operación dependerá del modelo, del tipo de bola y del taller: las cifras suelen oscilar entre los 250 y los 800 euros.

Segundo paso: el informe de conformidad

Colocar una bola de remolque es una reforma de importancia, así que tendrás que homologarla: para ello, tienes que pedir un informe de conformidad y la encargada de proporcionártelo será la marca después de haber revisado su instalación. El siguiente paso es acudir a una ITV para legalizar el nuevo complemento de tu coche y añadirlo a la ficha técnica.

Tercer paso: las ITV

Para pasar la ITV de homologación, que suele costar unos cuarenta euros, tienes un plazo de quince días. No es una revisión habitual, así que deberás presentar el certificado de homologación del enganche, las instrucciones de montaje, el informe de conformidad, el certificado del taller donde se ha llevado a cabo la instalación, la ficha técnica y el permiso de circulación. Por cierto, no olvides avisar a tu seguro sobre este proceso para que cubra los hipotéticos daños que la bola puede causar a otros coches.

Y, por último, ten en cuenta que después de instalar la bola de remolque en tu vehículo, las siguientes ITV serán un poco distintas porque los técnicos harán algunas verificaciones específicas: por un lado, comprobarán que los datos identificativos de la bola coinciden con los de la documentación y que fueron registrados correctamente y, por otro, examinarán su estado y el funcionamiento de la instalación eléctrica.