Con la llegada del calor y las altas temperaturas vuelven las varices, o como médicamente se llama enfermedad venosa crónica (EVC). "Los síntomas más comunes son: el dolor, la pesadez, calambres, hinchazón y picor en las piernas", sostiene el Dr. Juan Peiró, secretario del Grupo de Trabajo de Vasculopatías de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN).

"Las varices o EVC es una condición crónica, vascular, progresiva y multifactorial relacionada con una alteración de las venas en el endotelio vascular y en las válvulas venosas con aumento de la presión venosa", explica Manuel Frías, coordinador del Grupo de Trabajo de Vasculopatías de la misma sociedad científica.

"La EVC en un verdadero problema de salud pública y no un problema estético solo, ya que se asocia a un aumento de la enfermedad cardiovascularrelacionado a estadios más avanzados de la CEAP y a una reducción de la calidad de vida".

Las varices afectan principalmente a la población caucásica en 30-50% en la mujer y en un 10-30% en los hombres, con menor prevalencia en asiáticos, hispanos y afroamericanos. "Los factores de riesgo que se asocian con mayor frecuencia al desarrollo de la EVC: la distribución genética familiar, edad, género o raza/etnia, los cuales se pueden considerar no modificables", sostienen los expertos.

Por otro lado, aquellos factores que sí pueden modificarse en mayor o menor medida son: la obesidad, el sedentarismo, la bipedestación prolongada, la exposición al calor, el uso de hormonas, el embarazo, la utilización de prendas ajustadas, los hábitos tóxicos y la alimentación.

Cómo mejorar las varices

Tal como informan los especialistas de SEMERGEN, existen diversas medidas que permiten prevenir las complicaciones y mejorar la calidad de vida de los que padecen la EVC, que es la adoptación de cambios en los estilos de vida:

  • Evitar el sedentarismo
  • Realizar ejercicios que mejoran el retorno venoso
  • Evitar el estreñimiento
  • Adaptar el calzado a la bóveda plantar y respetar la dinámica normal del pie
  • Evitar exposiciones prolongadas al calor en las piernas (saunas, sol, agua demasiado caliente, etc.)
  • Seguir una dieta saludable para tener y mantener un peso saludable
  • Evitar la bipedestación y sedestación prolongadas
  • Reposar con los pies elevados, durante 30 minutos, tres o cuatro veces al día.
  • Se complementa con la realización de descanso nocturno en la misma posición, estableciendo una diferencia de altura entre los pies y la cabeza de unos 15cm.
  • Realizar duchas frías ya que ayudan a reducir el volumen del pie, del perímetro del tobillo y de los síntomas subjetivos, debiendo realizarse con recorrido ascendente (de tobillo a ingle) por la cara interna de la extremidad.

Además de todo esto, "el uso de la terapia compresiva (uso de las medias elásticas) ejerce presión en las piernas para facilitar el bien funcionamiento del sistema venoso y para que la sangre ascienda de forma correcta, es importante tener en cuenta las características de cada persona y consultar a su médico de familia para la mejor opción", sostienen los médicos de SEMERGEN.

Por otro lado, continúan explicando los profesionales, otro punto muy importante es la terapia farmacológica que puede mejorar los principales síntomas en cualquier etapa de la EVC, según la evidencia científica actual, añadida a la terapia compresiva. Y por último, existen el tratamiento quirúrgico que puede ser necesario en algunos casos con diferentes técnicas.

El desarrollo de herramientas prácticas que ayuden a la planificación, reduciendo la complejidad de algunos de los procesos crónicos como en la EVC puede ayudarnos en la práctica clínica a mejorar el seguimiento en el diagnóstico, tratamiento y seguimiento por parte de los profesionales sanitarios que la abordan. Recientemente, el Grupo de trabajo de Vasculopatías de la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) ha diseñado el cuestionario VENOCHECK, que valora aspectos etiológicos, clínicos (clasificación CEAP), de severidad y calidad de vida, terapéuticos, presencia de complicaciones y criterios de derivación.