Los 10 destinos favoritos de los viajeros para este verano según la IA

A unos cuantos días de que inicie el verano, las redes sociales se han inundado de preparativos para los viajes en la temporada más esperada del año para disfrutar de una variedad de destinos que invitan tanto a la aventura, como a la relajación.

La plataforma con su propia Inteligencia Artificial, Drimer, especializada en crear y vender experiencias de viaje diseñadas por creadores de contenido, ha revelado los 10 destinos favoritos de los viajeros para este verano. Puntos como Bali, Corfú y Albania encabezan el ranking, consolidándose como las opciones más buscadas por quienes buscan combinar cultura, naturaleza y experiencias únicas.

"Este verano, los viajeros apuestan por destinos que mezclan cultura y mucha personalidad. Lugares que te hacen sentir parte de la historia y que ofrecen experiencias que antes solo veías en redes sociales. Pueden haber destinos repetidos, pero ninguna experiencia es igual a otra", cuenta Carlos Sáez, CEO y cofundador de Drimer.

Según la IA de Drimer estos son los destinos más deseados este verano:

Bali, Indonesia

Para el verano de 2025, Bali se confirma como el gran imán del sudeste asiático. Más allá de las postales de arena blanca y aguas turquesas en Uluwatu o Nusa Penida, la isla ofrece algo casi mágico: una convivencia armónica entre espiritualidad y ocio. Todo transcurre a un ritmo pausado, el famoso "Bali time" que invita a relajarse después de actividades

Corfú, Grecia

Corfú, la isla jónica que enamoró a Lawrence Durrell, se coloca a la cabeza del Mediterráneo en las búsquedas de 2025. Su capital, con fachadas venecianas teñidas de ocre y callejuelas perfumadas de buganvillas, es perfecta para holgazanear tras un chapuzón en Paleokastritsa. Las playas de agua turquesa se suceden como cuentas de un rosario, mientras que las tabernas familiares sirven pastitsada y ouzo hasta bien entrada la noche. En verano se multiplican los festivales de música tradicional y las regatas entre islotes, lo que convierte cada día en una celebración continua.

Albania

Todo apunta a que 2025 será el año en que Albania deje de ser "el secreto mejor guardado" para convertirse en el nuevo imprescindible del Adriático. Las playas vírgenes de la Riviera albanesa (Ksamil o Dhërmi) le hacen la competencia directa a su vecina Grecia, pero con precios mucho más amables y una atmósfera genuinamente local. Entre montañas kársticas, búnkeres convertidos en museos y pueblos otomanos como Gjirokastër, el país ofrece un viaje aún libre de masificación. Ideal para viajeros que presumen de descubrir destinos antes que nadie.

Montenegro

En menos de tres horas de carretera puedes pasar de navegar entre los picos que dibujan la bahía de Kotor a recorrer senderos alpinos en el Parque Nacional Durmitor. Esa concentración de paisajes épicos es lo que catapulta a Montenegro al top de deseos veraniegos para 2025. Su herencia veneciana, sus fortalezas estratégicas y una costa que alterna playas de guijarros con arenas color canela ofrecen historia y acción a partes iguales. ¿Buscas adrenalina? El río Tara presume de tener uno de los cañones más profundos de Europa, perfecto para rafting o zip-line.

Marruecos

Con nuevos vuelos directos desde varias ciudades europeas, Marruecos se prepara para un verano 2025 de récord. Marrakech sigue reinando con su zoco laberíntico, sus riads de azulejos hipnóticos y la plaza Jemaa el-Fna convertida cada noche en un teatro viviente de músicos, acróbatas y cocinas ambulantes. Pero la magia continúa más allá: rutas en 4×4 a las dunas del Sáhara, surf en Essaouira o degustaciones de tagine en Fez. Entre aromas de especias y el canto de los almuédanos, cada paso es un choque sensorial que se graba para siempre.

Tailandia

Hay clásicos que nunca pasan de moda, y Tailandia es uno de ellos. En 2025, Bangkok volverá a ser esa puerta neón donde se mezclan rascacielos y templos dorados, mientras Chiang Mai refuerza su fama de capital foodie con mercados nocturnos renovados. Pero el mayor reclamo sigue en el mar de Andamán: islas como Koh Lipe o Koh Yao Noi ofrecen la postal paradisíaca sin la masificación de épocas pasadas. Todo regado con pad thai callejero, masajes a pie de playa y la proverbial sonrisa tailandesa que hace sentir al visitante como en casa.

Centroeuropa

Para quienes sueñan con un verano de castillos góticos, cafés decimonónicos y óperas al aire libre, Centroeuropa está de vuelta en el radar. De Praga a Viena y de Budapest a Cracovia, 2025 trae festivales de música clásica, rutas enológico-imperiales y la novedad de trenes nocturnos renovados que facilitan enlazar capitales en pocas horas. Entre calles empedradas y plazas medievales, cada ciudad destapa capas de historia (imperios caídos, revoluciones y renacimientos) que se saborean mejor con un strudel o una jarra de cerveza artesanal.

Portugal

Portugal no necesita presentación, pero en 2025 suma nuevas razones para visitarlo. Oporto continúa su metamorfosis con bodegas modernistas y un frente fluvial repleto de terrazas, mientras Lisboa consolida su mezcla de melancolía fado y vanguardia gastronómica. La costa, desde la salvaje Comporta hasta las calas secretas del Algarve occidental, regala puestas de sol que, combinadas con un vinho verde bien frío, dejan huella en el alma. Y todo con la calidez lusitana que hace que el forastero se sienta vecino en cuestión de días.

Perú

Machu Picchu es solo la punta visible de un país que en 2025 intensifica su apuesta por el ecoturismo. Rutas poco transitadas por la Cordillera Blanca, lodges sostenibles en plena Amazonía y una escena culinaria imparable (con ceviche, cuy y recetas nikkei) convencen a quienes buscan experiencias profundas. Lima se corona como capital gastronómica de Sudamérica, mientras el Valle Sagrado integra comunidades rurales en proyectos de turismo responsable. Un destino que aúna aventura, cultura andina y uno de los sabores más ricos del planeta.

Japón

El País del Sol Naciente vuelve a liderar las listas de viajes de larga distancia gracias a la revalorización del yen y al boom del turismo rural. Tokyo sorprende con barrios cool como Shimokita y sus cafés de vinilos, mientras Kioto protege templos milenarios entre cerezos que, aunque no florecen en verano, dejan ver su verde más intenso. Este 2025 se inauguran nuevos tramos de shinkansen que acortan distancias con Kyushu y Hokuriku, facilitando explorar onsen remotos, senderos de cedros gigantes y costas volcánicas. Japón continúa mezclando hi-tech y tradición en una experiencia que, simplemente, engancha.

5 pueblos medievales que tienes que visitar al menos una vez en la vida