Una familia decide pasar el día en el campo, en Nuevo León, México, donde se llevan comida para hacer un picnic. Pero, mientras están sentados a la mesa, se ven sorprendidos por la aparición de un osodispuesto a unirse al banquete.

El animal se aproxima a la comida y comienza a comerse todo lo que ve ante la estupefacción de la madre y su hijo, que se mantienen inmóviles para evitar ser atacados por él. "¡Qué sangre fría mantienen!", destaca María Gómez.

La escena la graba una tercera persona, a la que, según la zapeadora, "no le tiembla el pulso mientras ve cómo su familia se juega el tipo", aunque Quique Peinado cree que quién graba es el padre del oso.