Esa es la teoría. Pero Aguirre conocía la práctica. Así trata en 2006, vía sms, a Miguel Blesa, entonces presidente de Caja Madrid. Sin mediar saludo, le dice que Nacho, Ignacio González, su mano derecha, le hablará de un asunto importante". "Hazle caso", añade.
El asunto era ordenar a la Caja que le diera 120 millones a Telemadrid para comprar los derechos de retransmisión del Real Madrid. Unos días después, el propio número dos de Aguirre y hoy presidente de la Comunidad de Madrid le "instruye" a Blesa en otro mensaje para cerrar la operación: "Miguel, necesito urgentemente que mañana a primera hora firmes la oferta conjunta con Telemadrid, tal como quedamos. [...] No hay que añadir o cambiar nada, tan solo tu firma junto a la de Soriano [director general de Telemadrid". Finalmente no hubo acuerdo con el Real Madrid, pero sí con el Atlético de Madrid y el Getafe.
Durante un desayuno informativo Aguirre vuelve a usar a su hombre fiel para transmitirle una orden a Blesa. Ella está demasiado ocupada con el presidente Rajoy, así que González le envía este mensaje de su parte: “Me dice la jefa que si tienes que poner dos consejeros de la caja en Iberia, y uno es ejecutivo de la caja, que el otro sea Mercedes Rojo Izquierdo”.
La susodicha no tiene ningún conocimiento financiero. Empezó los estudios de Farmacia pero no terminó la carrera. Su mayor mérito: ser asesora de Esperanza Aguirre. Las conexiones entre el Partido Popular y Bankia son numerosas. Un ejemplo, el Gobierno de la Comunidad de Madrid: La presidenta, Esperanza Aguirre, tenía a su primo en el Consejo de Administración.
Su vicepresidente, Ignacio González a su cuñada como consejera de la Corporación Cibeles, dependiente de la Caja. El exsecretario general del PP de Madrid, Francisco Granados, y el que fue Consejero de Asuntos Sociales, Salvador Victoria, tenían a sus respectivas esposas colocadas en una filial de la entidad.
En 2009, la buena relación entre Blesa y Aguirre parece romperse. Entra en juego el entonces alcalde Alberto Ruiz Gallardón. Esperanza Aguirre y Alberto Ruiz Gallardón, presidenta de la Comunidad de Madrid y alcalde de la capital se pelean por colocar a un hombre fiel como presidente de Caja Madrid.
La relación entre Blesa y Aguirre era tensa. Si se encontraban en público, no lo podían disimular. Cuando los tribunales suspenden el proceso electoral que Aguirre quería poner en marcha para sustituirle, el director general de Caja Madrid le escribe este mensaje a Blesa celebrándolo: Matías Amat: “Es la enésima vez que Nacho González y la rubia [Esperanza Aguirre] se llevan un revolcón. Aprenderán? A los del pacto se les ha vuelto a quedar cara de gili... Felicidades¡¡¡”.
Así contesta Blesa a otro colaborador: Miguel Blesa: "Es una batalla, pero no la guerra. Pero un bofetón a la rubia".
¿Por qué Esperanza Aguirre no quiere más a Blesa? ¿Le llevaba la contraria? ¿O quería a alguien todavía más afín, como Ignacio González? En los correos electrónicos recibidos por Blesa, hay uno que da la voz de alarma. El asunto es revelador. En él, el secretario del Consejo de Caja Madrid habla de "facturas que enviaron del PP de Madrid para su abono por la Caja". Y dice que una de ellas está a nombre de "una sociedad que aparece en la prensa estos días". Los periódicos de ese día hablan de una trama llamada Gürtel.
Desde la Sexta Columna hemos invitado a representantes del Partido Popular a participar en este programa. Nadie del PP a nivel nacional, ni del partido en Madrid, ni del Gobierno autonómico madrileño, ni del grupo popular en el Congreso ha querido dar su opinión.
Miguel Blesa tampoco ha aceptado nuestra invitación.
"En ese momento, la pandemia..."
Pérez Medina expone una contradicción en la versión de la visita de Delcy Rodríguez: "No concuerda con los tiempos"
"Su versión es que Illa se quiere reunir con ella porque estaba interesada en comprar vacunas europeas, porque ya tenían cerrada la de la Sputnik. Es un dato absolutamente falso", afirma el periodista.