La sociedad gastronómica Gaztelubide es una de las más famosas de Donosti. En ella todo gira en torno a la comida. Se fundó hace casi 90 años, en tiempos de hambre y después comenzó a forjarse allí la leyenda de los banquetes interminables.

José Ramón Mendizábal, presidente de la sociedad, explica que ahora se comenten menos excesos: "Existe una leyenda de las cazuelas que se metían los antiguos y arrastramos la fama de ello por gente que venía y se ponía hasta las cejas de comer y de beber. Todavía persiste esa leyenda, pero creo que ya no es así, cada vez menos".

Ahora se come menos cantidad que antes y aunque allí tampoco se va a hacer dietas, en las últimas décadas algo ha cambiado. "Existía otra forma de cocinar, las comidas eran más grasientas y se comía mucho más. Ahora es frecuente cómo se deja comida en los platos", añade Mendizábal.

Preguntado por los socios que a lo largo de los años han dejado de asistir por factores como el colesterol, el presidente de la sociedad gastronómica, responde que no tienen "una estadística", pero se sincera: "Quien más, quien menos, vas al médico a hacerte a alguna analítica y siempre hay algún piloto rojo que se enciende".

"En los últimos años ha habido un cambio. Van saliendo nuevos estudios que indican que la alimentación es un factor muy importante en el desarrollo de nuestra salud y ahora la gente se preocupa más", indica Virgina Gómez, dietista-nutricioinista del centro Enaltea.

Más de la mitad de la población adulta en España padece sobrepeso, según la OCDE y eso repercute sobre el bolsillo de todos: el sobrepeso representa casi el 10% del gasto en salud.