Por eso sigue atrincherada  con sus hijos  en su casa de Madrid. Si Helena pone un pie en la calle la policía podría detenerla Porque está incumpliendo un auto judicial. Un juez portugués le concedió al padre la custodia de manera provisional  a finales de 2011. Pero ella ya estaba en España con los niños. Ahora el Juzgado número 25 de Madrid le da la razón al juez luso y los niños deben volver a Lisboa con el padre.

El drama vivido hoy en Valencia con Isabel y sus hijos, podría repetirse en Madrid porque Helena se niega en rotundo a separarse de sus hijos, de quienes dice que “se los van a tener que quitar por la fuerza”.

De momento todo sigue igual, pero temen que el juez dicte una orden judicial y entren en su casa para llevarse a los pequeños a la fuerza.