El experto ha explicado que, en caso de encontrarnos en un coche, "éste tiende a flotar": "En el momento en el que el agua cubra media rueda ya tiene una cierta flotabilidad y empieza a deslizar cuando la corriente es importante".

El coche no es un lugar seguro, por lo que "debemos tender a salir lo antes posible en medio de una situación segura". En caso de que la situación ya sea crítica, lo primero es "no introducirse en zonas donde veamos que hay corrientes".

Si el coche ya anda fluido por el agua, no se debe soltar el cinturón de seguridad: "El coche será volteado, y en el momento en el que se estabilice es cuando debemos intentar salir".

"Será imposible abrir la puerta donde choca la corriente con el coche. Por lo que, lo normal es abrir la ventanilla e intentar salir por ella. Buscar una estructura donde uno pueda sostenerse en un anclaje que tenga menos resistencia que el vehículo", ha continuado explicando el director de Emergencias.

Por el contrario, algo que no se debe nunca hacer es "entrar en una carretera o camino donde ya está atravesando el agua, aunque lo conozcamos o estemos acostumbrados".

En el caso de que no encontrarse dentro de un coche, cuando el agua llega a las rodillas ya es una situación complicada: "Si tienes que nadar, debes hacerlo siempre a favor de la corriente y donde puedas encontrar una orilla".