Varios traficantes descargaron hasta 2.000 kg de droga en la malacitana playa de Manilva a plena luz del día, sorteando a los bañista y con total tranquilidad.

Desde el chiringuito unos turistas grabaron la escena sin dar crédito a lo que estaban viendo, mientras que en la arena, por lo increíble de la situación, hasta dudaban de que los paquetes que sacaban de la lancha fuera realmente droga.

"Fue todo muy raro, los paquetes tenían números y pensé claro no puede ser pescado", afirma un testigo. Los traficantes transportaron los fardos hasta la furgoneta en unos diez minutos sin que nadie se lo impidiera y cuando los agentes llegaron, los delincuentes ya se habían marchado.

Sin embargo, escenas de este tipo se están convirtiendo en habituales en la zona del Estrecho de Gibraltar, y según denuncia la asociación española de Guardias Civiles, los traficantes pueden actuar con tal impunidad por falta de 5.000 agentes en la zona.

Denuncian que es urgente ampliar la plantilla y mejorar los medios materiales, que son condiciones imprescindibles para evitar que esta zona de España se convierta en el mayor coladero de droga de Europa.