Dos años después de la inauguración de tres centrales termosolares en Sevilla, un acto presidido por el rey Don Juan Carlos y el príncipe heredero de Abu Dabi, la imagen de amistad de aquel momento ha derivado en un conflicto comercial que se resolverá en los tribunales.
La decisión del Gobierno de recortar el pago a las empresas de energías renovables de forma retroactiva ha sido el desencadenante. Al respecto, el ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, expresaba que el Ejecutivo tenía "una apuesta clara e inequívoca por las energías renovables" y admitía que "tenían un coste superior a otras energías".
A la demanda de Abu Dabi le preceden los bancos BNP, Deutsche Bank y la compañía luxemburgesa Eise Infrastructure. Todas ellas han iniciado pleitos que podrían costar pérdidas considerables a España. En definitiva, indemnizaciones multimillonarias que van a salir del bolsillo de todos.
Las grandes multinacionales no son las únicas afectadas por este recorte, de hecho, laSexta Columna ya denunció el caso de pequeños inversores que apostaron por las energías limpias impulsadas por el respaldo del Gobierno.
PODRÍA HABER CONSIDERABLES PÉRDIDAS PARA EL PAÍS