Nueva jornada del juicio del crimen de Patraix. Hoy el jurado ha podido escuchar los audios que la Policía grabó a los dos acusados antes de ser detenidos.

Se trata de pruebas clave en la investigación, ya que desvelan la conversación que tuvieron unos días antes en una cafetería, donde pactaban la versión que iban a dar.

Todo ocurrió el 8 de noviembre. Tres meses después del crimen, Maje llamó a Salva. En su conversación Salva confiesa que llamó a un amigo suyo policía, y aumenta la preocupación de Maje: "¿Qué dices? No hagas locuras Salva, eh".

La acusada confiesa que pensaba que iba a estar descartada de la investigación, pero no es así: "Están pinchando mi teléfono y todo".

Sin embargo, la conversación se torna hacia la tensión cuando Salva le pregunta por otro hombre al descubrir que mantenía una relación con él. "¿Dónde me quieres a mí en esta historia?", le pregunta el acusado, a lo que ella es tajante: "Bastante tengo yo".

El 28 de diciembre a Maje le filtran que ya hay un sospechoso, y así se lo transmite a Salva: "Ya tienen a un sospechoso con nombre y apellidos". El acusado se alegra de ello: "Bien, porque así por lo menos cobras el seguro". Ella afirma estar "descolocada", pero él la tranquiliza: "No temas".

Salva pensaba que no le estaban investigando, por eso quedan en una cafetería el 2 de enero. Allí se registra el audio que lleva a la detención: en él planean qué decir si son detenidos, como por ejemplo por qué Salva tenía la llave.

Pero los audios escuchados hoy también han puesto de manifiesto la relación que mantenían. Se declaraban su amor, pero Salva también conocía y aprobaba la relación de Maje con José.

Sin embargo, ocho meses después de entrar en prisión, sus versiones cambiaron, y así lo expusieron ayer en el juicio. Mañana se escucharán las conclusiones finales sobre el crimen de Antonio Navarro.