Escándalo de seguridad

¿Una espía rusa en las reuniones sobre Ucrania? Xavier Colás señala que "hay indicios de un engaño por parte del Kremlin"

El periodista expone que Steve Witkoff, enviado especial de Donald Trump, acudió a la reunión sin intérprete ya que no habló con la embajada y, por ello, no se siguió el procedimiento habitual.

El periodista expone que Steve Witkoff, enviado especial de Donald Trump, acudió a la reunión sin intérprete ya que no habló con la embajada y, por ello, no se siguió el procedimiento habitual.

Vladimir Putin habría colado a una espía rusa en las reuniones de paz para poner fin a la guerra de Ucrania con los representantes de Estados Unidos en Moscú. La mujer acompañaba a en calidad de intérprete al enviado especial de Donald Trump, Steve Witkoff. Para profundizar en este tema, Más Vale Tarde charla con Xavier Colás, periodista y autor de 'Putinistán'.

El periodista expone que Witkoff es un empresario "con muy poca experiencia en el servicio exterior" y se presentó a la reunión sin traductor "porque él quiere, no habla con la embajada antes y, por eso, no se sigue el procedimiento habitual". En la reunión, además, tampoco había nadie tomando notas. Muchas personas, como expone Colás, no pudieron esconder su sorpresa al ver que el enviado especial no contaba con intérprete. Por ejemplo, el exembajador de Obama, Michael McFaul, "presentaron mensajes de sorpresa en redes sociales".

Colás indica que se debe tener en cuenta que no se conoce toda la historia por el momento. "Sabemos que Witkoff estuvo dando vueltas por Moscú esos días, no fue directamente a la reunión", explica el periodista. Además, se desconoce si, durante el tiempo que estuvo en la ciudad rusa, llegó a tener su propio intérprete o si en realidad estuvo acompañado en todo momento por una persona que trabaje para el Gobierno ruso. El escritor señala que, además de la imprudencia de Witkoff, "hay indicios de un engaño por parte del Kremlin".

"Cuando Witkoff entra en esa sala, completamente solo, se da cuenta de que es el único norteamericano allí", explica Colás. El enviado señaló a la mujer y preguntó si era la traductora, y le indicaron que sí. "Después, se escucha una segunda pregunta de Witkoff diciendo '¿de la embajada?' y alguna voz, más bajito, dice como que sí", añade. Esto, como indica Colás, podría haber llevado al enviado especial de Trump a pensar que, realmente, se trataba de una intérprete de la embajada. "Es como si hubieran mandado a Paco Martínez Soria a la reunión de paz", comenta Iñaki López. La Casa Blanca, por su parte, guarda silencio ante este escándalo de seguridad.