"En 2022 todos los coches de Europa tendrán que llevar unos sistemas que funcionaran de una manera determinada cuando surjan imprevistos en la carretera", explica Antonio Lucas, director de Seguridad Vial de RACE.

Pero eso no es todo, el mecanismo del vehículo podrá hacer que otros sistemas dejen de funcionar en caso de riesgo. "Cuando estemos dando marcha atrás y algún peatón irrumpa por la parte posterior, el sistema automáticamente nos alertará de esa situación", comenta.

Sobre la nueva medida que ha aprobado el Parlamento Europeo para limitar a partir de 2022 la velocidad con un mecanismo automático, Lucas explica que "se va a incorporar un sistema que a medida que vayamos a más velocidad de la permitida primero se nos alertará de la situación. Después, el vehículo nos lo pondrá más difícil a la hora de acelerar. Las revoluciones comenzarán a bajar y el acelerador va a ser mucho más duro".

Otra medida que la UE pretende implementar es un alcoholímetro que dependiendo de nuestra condición nos dejará arrancar o no el vehículo. "Se trata de un sistema que ya se conoce en otros países. Obliga a que el conductor tenga que soplar. Lo que Europa quiere hacer es incorporar este mecanismo automáticamente".

"También una cámara podrá registrar dónde miramos mientras conducimos y nos alertará cuando no estemos prestando atención a la carretera y a las circunstancias del tráfico", asegura Lucas.

"Muchos vehículos ya incorporan estos sistemas, pero lo que la EU quiere hacer es que no existan muchas diferencias entre un coche de gama alta que tiene estos sistemas y los que no los tienen. La seguridad no tiene que ser un artículo de lujo, sino que sirva para salvar vidas", sentencia.