Rafael Catalá y el expresidente de Renfe intervinieron en una sesión de la comisión de investigación sobre el accidente del Alvia en Santiago. Catalá, en el momento del accidente, ocupaba el cargo de secretario de Infraestructuras del Ministerio de Fomento.

En esa intervención, Catalá niega las palabras de Teresa Gómez Limón, víctima del accidente y diputada del PP en la Asamblea de Madrid por aquel entonces, que aseguró haber sido presionada por el político cuando aun estaba convaleciente.

Gómez Limón contesta a la declaración de Catalán en este vídeo de Liarla Pardo: "Lo que ha dicho en la comparecencia es mentira, me llamó para decirme que no hablara así porque perjudicaba al PP y yo le dije que lo que le pasara al PP me importaba una mierda".

Por otro lado, el maquinista del Alvia en el que murieron 80 personas y otras 148 resultaron heridas habla por primera vez en un medio de comunicación tras el trágico accidente.

Francisco José Garzón destaca en exclusiva a Liarla Pardo que está nervioso por la entrevista porque no es de "aparecer en público". Además, confiesa que espera que sea "su primera y última entrevista" al respecto. Garzón se emociona y, llorando, detalla que habla de forma "desinteresada completamente": "No quiero nada". Además, cuenta cómo fue la llamada que le "desubicó" momentos antes de la tragedia.

Garzón, también destaca que "falló la seguridad de ADIF y puede que también de Renfe". "Soy responsable, pero no culpable. Si tengo que pagar, pago, pero que paguen más", afirma.

"Había interés en que fuera el único culpable, querían proteger la Marca España": así de tajante se muestra el maquinista, quien declara que "había mucho interés en que estuviera en el calabozo mientras comparecía el ministro del Interior".