Miles de personas han recorrido las calles de ciudades españoles reivindicando lo que ya debería ser un hecho, la igualdad. Pero este año también ha sido palpable la división en el movimiento feminista. Porque lo que debería ser un día de unidad se ha vivido, en muchas ocasiones, como dos bandos.
Por un lado, las feministas que defienden la visión tradicional del movimiento: "Esta es la manifestación de las feministas que llevamos 300 años luchando por los derechos de las mujeres," defendía una manifestante. En el lado opuesto, las feministas que defienden la integración de las mujeres trans en el movimiento: "La excluyente es la otra, que quiere excluir a las mujeres. Ha sido un retroceso para el movimiento feminista tremendo. Lo único que podemos sentir es tristeza".
Ese distanciamiento se ha evidenciado en las dos manifestaciones que se han convocado en Madrid. Dos marchas feministas separadas. Una organizada por la comisión del 8M, la de las asambleas públicas, que ha recuperado el recorrido clásico prepandemia. La otra, por el Movimiento Feminista de Madrid, en contra, entre otras cosas, del "borrado" de las mujeres que consideran que ocasiona la ley trans. Y entre las dos convocantes, una división evidente: la ley del 'solo sí es sí' y la reforma que aprobó el Congreso.
Posturas muy alejadas por el 'solo sí es sí', y posturas todavía más distanciadas por la ministra de Igualdad. En la calle, mujeres que defienden y llaman valiente a Irene Montero chocan contra las que han pedido directamente su dimisión.
Otro de los puntos que separa al movimiento feminista es, precisamente, la ley trans, que este año también ha estado presente. Porque hay manifestantes que la ven como un símbolo de igualdad. Otras defienden que la ley trans perjudica a las mujeres y que ser mujer es una cuestión biológica
Una clave más: la abolición de la prostitución, punto fundamental en estas manifestaciones. Porque que existan mujeres prostituidas es intolerable, y porque muchas feministas afirman que la prostitución es incompatible con los derechos humanos y la igualdad de género.
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