Pau Donés vivió sus últimos días en la casa que tenía en el Val d'Aran, en Lleida, rodeado de su familia. En su entrevista con Jordi Évole confesó "estar feliz" por estar en aquel lugar, aunque había alguna preguntaba que a veces irrumpía en su mente y le hacía entristecer.

"Es una felicidad cabrona porque a veces pienso 'si en vez de irme el mes que viene, me fuera el año que viene...' ¿Por qué no me puedo quedar un poco más a disfrutar de todo esto? Eso me pone muy triste", señaló en su charla con el presentador de laSexta.

A pesar de esa tristeza, siempre quiso quedarse con los momentos buenos y con la vida. "Prefiero quedarme con que ahora estoy aquí y ya volveremos", aseguró. Una reflexión muy emotiva que puedes revivir en el vídeo superior cuando se cumple un año de su fallecimiento.

Otros momentos de la entrevista

En esta charla también intentó dar visibilidad y más normalidad al cáncer y a los enfermos terminales porque, según como recordó, en nuestra sociedad la muerte sigue siendo un tema tabú. Por ello, se quiso mostrar con la sonda que utilizaba para alimentarse e hidratarse en la recta final de su enfermedad.

"Ver a un tío que se va a morir da un poco de respeto. Estoy enfermo de cáncer y este tubo me ayuda a alimentarme y a hidratarme, no pasa nada", señaló en este fragmento de su entrevista con Évole:

El cantante afrontó su enfermedad y la muerte con fortaleza porque le importaba "más la vida que la muerte". En este sentido, nos recordó que lo peor que existe es el miedo, que solo sirve para "bloquearnos" y no dejarnos disfrutar de lo que nos rodea. Aseguró que él siempre vivió sin miedo "porque el miedo es algo que te corta la libertad de ser tú mismo".