laSexta emite, el próximo martes, una nueva edición de El Jefe Infiltrado. El fundador y actual vicepresidente de una de las franquicias de moda, 'Mercado Provenzal' será el protagonista.

Luchar desde dentro contra la idea de que el low cost es sinónimo de baja calidad. Ese es el objetivo del nuevo Jefe Infiltrado, que no dudará en ponerse el delantal de camarero, aprender a tirar cañas, a cortar jamón y a atender a una avalancha de clientes en hora punta para conseguirlo. Trabajos a los que sabía que tendría que enfrentarse pero también a otros que no había contemplado, como limpiar los baños.

Bajo una falsa identidad, el jefe vivirá en primera persona la dureza de tener un exigente superior, dudará de si todos sus trabajadores están a la altura de las exigencias y hará todo lo que esté en sus manos por escuchar lo que piensan de la empresa quienes trabajan en ella.

Cervezas a 40 céntimos, montaditos a 50 céntimos, desayunos completos a 1.50 euros … estos son los precios que han convertido a 'Mercado Provenzal' en una franquicia de éxito que hoy se encuentra a la cabeza del sector. Premio a la Mejor Franquicia, la empresa ha conseguido que en tiempos de crisis la gente pueda salir y tomar algo a precios más que asequibles. Sin embargo hay quienes dudan de que a estos precios se puedan ofrecer productos de calidad. Es necesario que los empleados sepan transmitir al cliente la filosofía de negocio de la empresa y buena parte de esta responsabilidad recae en Álvaro Samper, fundador y vicepresidente de la compañía, jefe implacable que ha decidido infiltrarse para descubrir verdaderamente cómo trabajan sus franquicias, detectar los errores que puedan estar cometiendo algunas de ellas y conseguir que desde el primer hasta el último trabajador sepa transmitir a los clientes la filosofía de Mercado Provenzal.

Pero el camino no será fácil. En su aventura por supervisar cada detalle de las franquicias con las que va a trabajar de incógnito sufrirá las duras condiciones del mundo de la hostelería, descubrirá que ser aprendiz es más difícil de lo que pensaba y que hay que aprender rápido si no se quiere ser cuestionado o incluso despedido. El jefe infiltrado trabajará en uno de los locales que mejor funcionan del país a pesar de no ser de los mejores ubicados, donde conocerá a una incansable pareja que lo da todo por su trabajo pero que llevan los protocolos tan al extremo que a veces puede perjudicarles. También visitará un centro ubicado en un lugar privilegiado pero cuyos resultados no están a la altura de lo esperado.

Durante su experiencia, el jefe conocerá a una encargada con demasiada responsabilidad a sus espaldas, a una camarera que no tiene demasiado claro en qué consiste el modelo low cost sobre el que se asienta Mercado Provenzal y a un formador de franquiciados cuyos métodos no son precisamente los más adecuados para enseñar a los futuros profesionales de la marca.