El restaurante ya está vacío y ha llegado el momento de descansar, ocasión que Dado Limaaprovecha para charlar con Fede, el cocinero. Su empleado no tiene pelos en la lengua y critica la actitud de su jefe en Toro Burger. Eso sí, sin saber que lo tiene frente a él. "Yo soñaba con ser pastelero o ser un cocinero de esos que aparecen en la tele", reconoce. "Después, las cosas se van torciendo", confiesa.
"Aquí no nos dejan aportar absolutamente nada. Son las hamburguesas que él (el jefe) hace y ya está. En un año y medio que llevo aquí jamás me ha preguntado si tenía alguna idea, qué me parecía... Ni a mí ni a nadie", dice con rotundidad. "Creo que podríamos aportar muchísimo más, nosotros también tenemos buenas ideas", sigue quejándose.
Más Noticias
- Reparte 500 tarjetas con un código QR para conseguir que su amigo ligue: "No sabe como quitárselo de encima"
- Katy Perry engañó hasta a su madre en la Gala Met: así hizo creer que había ido con una foto creada por IA
- El viral de Rosalía por su acento en la Gala Met deja loco a Alfonso Arús: "No sabía que fuera puertorriqueña"
- Chanel arrasa en la semifinal de Eurovisión con una nueva coreografía de 'SloMo': "Todavía se superó más"
- Es pillada teletrabajando mientras se hace las uñas en un salón de belleza: "Hay que tener un poco de decoro""
Fede echa en falta tener algo (o alguien) que le motive. El desánimo de Fede preocupa al jefe. "Yo no puedo permitir esta clase de sentimiento dentro de Toro Burger", dice con cierto pesar Dado Lima ante las cámaras de El Jefe Infiltrado.
Hemeroteca
Las lágrimas de Rocío cuando el jefe infiltrado le da 4.000 euros para compensar la pensión de viuedad que no puede cobrar
Rocío se emociona en este vídeo con el regalo de El jefe infiltrado y es que la sorprenda al darle 4.000 euros para compensar la pensión de viudedad que no puede cobrar después de que su pareja falleciera.