El agricultor Manuel García, oriundo de la comarca orensana de la Baixa Limia, defiende al ministro de Consumo, Alberto Garzón, después de las críticas generalizadas por sus críticas al modelo intensivo de las macrogranjas. "Tiene moita razón", asegura en una entrevista en Al Rojo Vivo.

"El problema es la mala gestión de residuos agroganaderos que se ha hecho durante décadas", razona el labrador mientras muestra cómo las emisiones de las explotaciones ganaderas están impactando al medio ambiente.

"Esto debería ser un curso de agua corriente y limpia y lo que tenemos poco menos que es una depuradora de vegetación acuática", abunda, mostrando el río detrás de él. "Es tal el exceso de nutrientes que llega al río que la vegetación crece exageradamente y acaba por consumir el oxígeno del agua y no deja más vida", explica.

El agricultor sostiene que a estas macrogranjas no se les ha exigido "la más mínima gestión" de sus residuos y que ahora mismo la comarca, que produce la mitad del ganado porcino de la provincia de Ourense, ya no puede absorber todas las externalidades que genera.

"Es totalmente incierto que se cumpla la normativa, si no, no tendríamos el resultado que tenemos", sostiene.

García también insiste en que el consumo de carne en nuestro país es desproporcionado: "Teniendo en cuenta el número de cerdos que se sacrifican en España, cerca de 60 millones, me parece que sí".

"Quizá el problema sea que la mayor parte de esa carne no la consumen los españoles, sino que es producida aquí para vendérsela a otros países. Y aquí nos queda la mierda", censura.