Fernando Simón, director del Centro de Coordinación de Alertas y Emergencias Sanitarias, ha señalado que el número de sanitarios contagiadosporcoronavirus es de 3.910, entre médicos, enfermeros y auxiliares.

Una cifra que Alda Recas, presidenta de la Asociación Madrileña de Enfermería, ha apuntado que "se sabía y se esperaba". "Son muchísimos más. Tenemos enfermeras, por ejemplo, que están en su casa desde hace 10 días esperando la prueba o el resultado de esta, el cual refieren que está perdido por el sistema madrileño", ha indicado.

Contagios que, según ha explicado, se deben a "la falta de equipos que hace que se protejan contra este virus" y a la "falta de personal"; una situación, a su juicio, "gravísima".

"Hay que sacar esos test y hacérselos al personal sanitario, porque, en una Comunidad de Madrid de 10 años de recortes en personal y de privatización, permitir que nuestros sanitarios caigan, caigan y caigan es gravísimo", ha expresado.

Sobre la posibilidad de un colapso, Recas ha asegurado que "estamos en una semana en la que nos estamos todos preparando". "Por eso son importantísimas las infraestructuras cercanas a los hospitales como, por ejemplo, las de Médicos sin Fronteras, donde los pacientes moderados o leves van a estar recibiendo un seguimiento por parte de médicos o enfermeros", ha señalado.

Necesidad de reforzar la atención primaria

Alba Ricas ha destacado, también, la importancia de que se mantenga el servicio de atención primaria. "Ese servicio está descongestionando muchísimos casos que se puede evitar que lleguen a los hospitales", ha apuntado.

"Combatir el virus implica, también, el trabajo comunitario. Para gente vulnerable que está en sus casas el seguimiento crónico es importantísimo. La atención primaria es el contacto directo con la comunidad", ha añadido Recas.

En esta línea ha recalcado que, "en cualquier emergencia", es fundamental reforzarla y no acabar con ella.

En relación a qué habría que mejorar en la respuesta a la crisis sanitaria, la experta ha afirmado: "Estructuras cercanas a los hospitales, donde se pueda poner a los leves y moderados; hacer test, para tener claro qué está pasando en la comunidad; fortalecer la atención primaria; y, sobre todo, cuidar al que cuida".

"Los que estamos en primera línea exigimos que nos cuiden", ha concluido.