El debate de investidura de Pedro Sánchez arrancará finalmente este miércoles. Una investidura que tendrá lugar en un contexto de gran intensidad en la calle, tras más de una semana de disturbios ante la sede nacional del PSOE en la madrileña calle Ferraz.

Así, ya desde este lunes la seguridad es máxima en los alrededores de la Cámara Baja, con controles peatonales en los que miembros de la UIP piden a todo aquel que quiera entrar en la carrera de San Jerónimo que se identifique: solo pueden acceder las personas vivan o trabajen en esta céntrica calle de la capital. Así, quienes quieran llegar hasta la Puerta del Sol deben hacerlo rodeando el Congreso, por las calles aledañas, sin posibilidad de transitar por la carrera de San Jerónimo.

Un control peatonal que se repite en ambos lados de la calle y en todas las esquinas, ante un Congreso ya absolutamente blindado, tal y como se puede observar en el vídeo que ilustra estas líneas, en el que puede verse a algunas personas acudiendo a manifestarse con pancartas, banderas de campaña e incluso esterillas y tiendas de campaña, porque algunos tienen la intención de acampar ante el Congreso. Algo que, según fuentes de seguridad de la cámara, no les pueden permitir de ninguna manera.