Más de 2 millones de palestinos viven ahora en La Franja de Gaza, también conocida como sólo Gaza, considerada ahora como un territorio, ocupado por Israel. Paro, misiles, escases de agua y de luz son algunas de las miserias con las que cada día tienen que vivir sus ciudadanos: casi la mitad tienen menos de 14 años. Además, es uno de los lugares con una de las densidades de población más altas del mundo.

Gaza limita al oeste con el mar Mediterráneo, con Egipto al sur y con Israel -su enemigo- al norte y al este. Esas fronteras además, son prácticamente infranqueable porque, tal como explica la periodista Ana Cuesta en Al Rojo vivo, tienen vallas metálicas y muros de varios metros de altura; incluso, muros bajo tierra.

Se trata Gaza de un territorio que apenas tiene 360 km cuadrados (poco más que la ciudad de Madrid) y en coche se tarda sólo en recorrer poco más de 1,5h de norte a sur. De los 2 millones de habitantes, la mayoría nunca han podido salir de Gaza, desde que Israel impuso su bloqueo en 2007.

La vida allí no es nada fácil: un 64% de los hogares son pobres principalmente por su alta tasa de desempleo: casi la mitad de los ciudadanos de Gaza en edad laboral, no tienen trabajo. Y los hogares se enfrentan cada día a graves dificultades como son el acceso al agua y la disponibilidad de luz eléctrica.

Casi el 95% de las aguas subterráneas no son aptas para el consumo humano y el agua del grifo es demasiado salada y no se puede beber. Por otro lado, sólo hay 2-3-4 horas de electricidad al día durante la noche. A todo ello, finaliza Cuesta, hay que sumarle la destrucción que dejan las bombas y proyectiles que suceden de forma frecuentes, y queen las ultimas 48 horas se han convertido en una constante.