Después de más de 25.000 pequeños seísmos que no han dejado de sacudir La Palma durante ocho días y habían elevado la isla 15 centímetros, el magma que empujaba bajo el suelo se abrió camino: desde las 15:13 horas La Palma vive su octavo volcán en tiempos históricos, de nuevo en la Cumbre Vieja.

La erupción del volcán en La Palma es de características muy similares a todas las erupciones históricas que se han sucedido en estas islas. Se trata de una erupción de tipo estromboliano, iniciada a través de una fractura y con emisión de lavas, piroclastos y gases.

El volcán comenzó a rugir en forma de una sacudida y una fuerte explosión que generó una columna de cenizas, a la que pronto siguieron borbotones de lava elevándose decenas de metros sobre el suelo desde varias bocas eruptivas. Hasta ocho bocas alineadas en dos fisuras, han contado los expertos del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcán).

¿Qué ha causado la erupción?

La causa de la erupción la debemos buscar en la acumulación de magma en la base del edificio volcánico de La Palma (entre 6 y 8 kilómetros de profundidad), roca fundida que proviene del manto terrestre, generado en una zona denominada astenosfera y que se encuentra a unas pocas decenas de kilómetros de profundidad.

En esta zona, las condiciones de presión y temperatura hacen posible que la roca que allí se encuentra se pueda fundir parcialmente, generando así el magma. Este líquido de composición silicatada, que contendrá restos de roca, cristales en suspensión y gases disueltos, tiene una densidad menor que la roca de su entorno.

Dada la diferencia de densidad con la roca encajante, cuando el magma se acumula en cantidad suficiente, tiene tendencia a ascender (por flotabilidad) hacia zonas más superficiales aprovechando fracturas ya presentes en la roca o que el mismo empuje del magma puede crear. De esta forma, ascenderá hacia niveles de menor presión y temperatura, e incluso podrá acumularse en niveles intermedios en zonas de contacto entre rocas de distintas propiedades.

¿A qué zonas afecta?

La erupción ha estallado en el municipio de El Paso, uno de los cuatro que estaban en alerta por riesgo volcánico desde el lunes pasado, en una zona escarpada de pinares conocida como Cabeza de Vaca, sin viviendas en su círculo más próximo, por lo que no ha causado víctimas, según ha explicado el Cabildo de La Palma.

"La seguridad de las personas está garantizada", ha corroborado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que se ha desplazado a La Palma para asistir a la reunión del comité director del Plan de Protección ante Riesgo Volcánico de Canarias (Pevolca), junto al jefe del Ejecutivo canario, Ángel Víctor Torres.

¿Hay riesgo para la población?

Sí hay núcleos de casas ladera abajo, que ya han sido evacuadas porque están expuestas a las coladas de lava, y hay algunas viviendas afectadas, al menos ocho, pero su número irá creciendo a lo largo de la noche. Las coladas de lava, a 1.075 grados centígrados de temperatura, avanzan sin que se pueda hacer nada para detenerlas, pero de forma relativamente lenta: 700 metros por hora.

¿Cuánto va a durar?

Aún es pronto para marcar los tiempos pero este tipo de erupciones se pueden alargar desde varias semanas hasta incluso varios meses.

"La bolsa que puede estar a tres o cinco kilómetros de profundidad está conectada con otra bolsa a 20 o 30 kilómetros, por lo que la retroalimentación de la que está a más profundidad sobre la más somera podría hacer que la erupción se alargue", ha añadido el director del Instituto Vulcanológico, Nemesio Pérez.

¿Qué sucede si la lava llega al mar?

El geólogo y divulgador científico Nahúm Méndez ha explicado en Al Rojo Vivo que es un fenómeno muy "espectacular" que se puede ver en islas volcánicas y que puede generar "fenómenos explosivos" precisamente al entrar en contacto con el agua.

Esto se debe a que se produciría un enfriamiento muy rápido. Como ejemplo, el experto ha indicado que el efecto sería similar al que ocurre cuando ponemos un vaso de cristal muy caliente en un vaso de agua fría, lo que provoca que el cristal se rompa.

En este caso, la lava también se rompería al entrar en contacto drásticamente con otra temperatura.

¿Y los gases que emite el volcán? ¿Son peligrosos?

El nuevo volcán de La Palma ha emitido a la atmósfera entre 6.000 y 9.000 toneladas de dióxido de azufre (SO2), según la primera estimación del Instituto Volcanológico de Canarias (Involcan). El coordinador científico de Involcan, Nemesio Pérez, ha explicado que la erupción se podrá dar por terminada cuando transcurran varios días sin que se produzcan emisiones de dióxido de azufre.

Las autoridades ha pedido a la población que no se acerque a la zona a observar las lenguas de lava ya que es peligroso inhalar los vapores.