En una nota de prensa, la Policía explica que las investigaciones sobre esta red se iniciaron a mediados de septiembre cuando el servicio de Salvamento Marítimo rescató una embarcación de juguete, en la que viajaban a la deriva seis personas, todas de origen marroquí y cuatro de ellas menores de edad.
Los inmigrantes fueron rescatados y trasladados al puerto de Algeciras y posteriormente a dependencias de la Policía Nacional de esta localidad. Las investigaciones posteriores revelaron que estas seis personas habían pagado por el viaje unos cuatro mil euros cada una.
La organización les había informado de que realizarían el viaje en un barco de pesca y de que cuando estuvieran próximos a la costa española tendrían que terminarlo en pequeñas embarcaciones de juguete que ellos mismos tenían que hinchar.
Durante el trayecto un miembro de la red llegó a colocar una navaja en el cuello a uno de los menores que realizaba el viaje. Una semana después esta organización inició un nuevo viaje, esta vez con 27 marroquíes, 20 de ellos menores de edad.
Como algunos de los menores no habían satisfecho el total de los entre 3.000 y 4.000 euros que les exigían a cada uno por la travesía, uno de los miembros de la organización comenzó a agredirle para después colocarle una navaja a pocos centímetros de su cuello para que le entregara todo el dinero que poseía.