El ISR es una técnica que pretende acabar con las muertes de bebés por ahogamiento en el mundo, y cada vez se está haciendo más popular en muchos rincones del planeta.

El método consiste en enseñar a los bebés a darse la vuelta cuando caen al agua, de manera que puedan flotar y respirar hasta que un adulto llegue para socorrerlos.

Sólo en 2015, 25 bebés murieron por ahogamiento en España, y es que se trata de la segunda causa de mortalidad accidental en menores de 14 años. Además, sólo hacen falta 27 segundos para que un bebé fallezca ahogado.

Sin embargo, esta técnica está encontrando muchos detractores, ya que para muchas personas, un aprendizaje tan agresivo puede provocar traumas en los niños. En lo que todos coinciden es en que la mejor solución es estar cerca del bebé para protegerlo.