Los detenidos, presuntos autores de un delito contra la salud pública y de un delito de defraudación de fluido eléctrico, fueron arrestados el pasado 20 de julio. Son dos hombres y una mujer vecinos de Sant Jaume de Llierca, Girona.
Agentes de la comisaría de Olot se dirigieron y constataron que desde el exterior del inmueble se sentía un fuerte olor a marihuana. Después de hacer las comprobaciones pertinentes constataron que, a pesar de que el piso constaba como parado y hacía mucho tiempo que estaba dado de baja de la compañía eléctrica, del interior salía un fuerte olor de marihuana y había luz y ruidos de ventiladores.
Por este motivo, los agentes se pusieron en contacto con la entidad bancaria propietaria del piso para poder acceder y comprobar qué había dentro. El 9 de julio, los mossos de Olot entraron y encontraron una plantación de marihuana. Concretamente, se localizaron 1.050 plantas de marihuana, que estaban en diferentes aposentos del domicilio, así como sistemas de ventilación, fertilizantes, luz y abonos para poder crecer en óptimas condiciones.
Durante el registro también se vio que la instalación estaba conectada de forma fraudulenta a la luz y, según las estimaciones de la compañía eléctrica, habrían podido defraudar unos 2.279 euros anuales. Después del hallazgo, los agentes decomisaron todas las plantas y se centraron en la investigación de los responsables de la plantación.
La investigación concluyó el pasado 20 de julio con la localización y detención, en Sant Jaume de Llierca, de los tres responsables de la plantación. Los detenidos, que tienen antecedentes, pasaron el día 21 de julio a disposición del juzgado de instrucción en funciones de guardia de Olot, el cual decretó su ingreso en prisión.