Juan Pedro, que con 595 kilos llegó a ser el hombre más obeso del mundo, está preparado para entrar al quirófano tras perder casi el 30% de su peso corporal.

Al momento de ser pesado, Juan Pedro había perdido poco más de 175 kilos, situándose en 419. Aunque sigue siendo uno de los hombres más obesos del mundo, la pérdida de peso le proporciona la oportunidad de ser sometido a cirugía con un riesgo menor.

En un comunicado, el centro especializado en cirugía de obesidad indicó que tres meses después de que se pusiera en tratamiento en manos del doctor José Castañeda Cruz, el paciente será intervenido en las instalaciones del Hospital Jardines de Guadalajara.

Juan Pedro Franco, el hombre más obeso del mundo

Juan Pedro llegó a las pruebas con una diabetes tipo II descontrolada, hipertensión, enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) e hipotiroidismo, lo que unido a su gran sobrepeso lo ubicaba como candidato a muerte inminente.

El tratamiento de adelgazamiento consistió en una dieta equilibrada diseñada para que, sin pasar hambre, pudiera ir bajando peso para conseguir una reducción que le diera mayores oportunidades para el proceso quirúrgico.

Se espera que Juan Pedro pueda bajar hasta un 50% de su peso remanente en los próximos seis meses y casi una tercera parte más tras la segunda intervención. Luego deberá ser atendido vía cirugía plástica para librarlo de más de 30 kilos de piel que le sobrará.

Se estima que para finales de 2018, Juan Pedro podría pesar alrededor de 110 kilos, con una mejora absoluta de todas sus patologías y con la posibilidad de rehacer y continuar con su vida.