Niels Hoegel, es un enfermero alemán de 40 años, que podría convertirse en el peor asesino de la historia reciente de Alemania. En 2015 el hombre fue juzgado por asesinar a dos pacientes en el hospital alemán de Delmenhorst.
Las investigaciones sobre este asesino no quedaron ahí. Tras declarar que había perdido la cuenta de cuantas personas había asesinado, los jueces continuaron con el caso y, por ahora, ya se han encontrado evidencia en 84 muertes más que podían estar relacionadas con las actividades de este hombre.
Durante el juicio al que se está enfrentando, el hombre aseguró que drogaba a sus pacientes para que entraran en paro cardíaco y al reanimarlos, sus compañeros lo vieran como un héroe. Según el diario 'Daily Mail', durante el juicio admitió que había realizado esta técnica con al menos 90 enfermos, de los que 30 murieron.
Los forenses están analizando ahora las autopsias de cientos de pacientes que habrían fallecido en los dos hospitales en los que Hoegel había trabajado. La fiscal Daniela Schiereck-Bohlmann asegura que no pueden "decir cuántos de los pacientes fueron víctimas".
El asesino ha asegurado que disfrutaba con la sensación de salvar la vida de alguien. Varios compañeros también podrían ser condenados por un delito de omisión, El caso que ha conmocionado a Alemania parece que nunca se podrá resolver por completo ya que es imposible calcular las víctimas a las que este enfermero asesinó.
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